Michoacán.- A través de un comunicado oficial, el Consejo Supremo Indígena de Michoacán (CSIM), conformado por autoridades civiles, comunales y tradicionales de más de 40 comunidades, se manifestó en contra de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y anunció la toma de instalaciones de la Subestación Eléctrica Carapan.
En el texto, integrantes de la CSIM exponen su inconformidad con la CFE y ponen en entredicho su condición de “empresa de clase mundial” y de “empresa socialmente responsable”.
Aseguran que se trata de una empresa que realiza “abusos sistemáticos” en contra de las comunidades indígenas, al hacer cobros “excesivos” y manteniendo en mal estado el cableado y los transformadores.
De igual forma, denunciaron la actitud del personal, calificándola de “prepotente y agresiva”. Agregaron que han recibido sido amenazados con ser criminalizados todos aquellos que se opongan a sus “políticas administrativas unilaterales”.
En este contexto, el documento señala que lejos de disminuir las tarifas del servicio, éstas han aumentado. Además, el CSIM afirmó que la CFE suspendió “el convenio de colaboración para el pago por servicios ambientales, a través de fondos concurrentes del programa apoyos para el desarrollo forestal sustentable 2018”, argumentando, dicen, escasez presupuestal y cuestiones administrativas no previstas.
A través del oficio se informa sobre una Jornada Estatal en Contra los Abusos de la CFE, la cual, explican, consistirá en la toma generalizadas de instalaciones de la empresa y la desobediencia civil, a través del cese del pago de la energía eléctrica.
Se advierte que se incrementará “progresivamente” la intensidad de las protestas a medida que la empresa continúe incumpliendo y “discriminando a los pueblos originarios”.
A continuación, el pliego petitorio:
1.- Hacemos responsables al Gobierno Federal y Estatal ante cualquier acto de represión y/o criminalización por defender nuestros derechos ante la CFE.
2.- Exigimos una mesa de trabajo de alto nivel con el Gobierno Federal, Estatal y la CFE para resolver el pago de servicios ambientales a las comunidades indígenas de Quinceo, Aranza, Capácuaro, Pomacuarán, Cocucho, Angahuan, Urapicho y Ahuiran que en conjunto resguardarían más de 7,500 hectáreas de bosque.
3.- Demandamos la instalación de una mesa de trabajo forestal con el Gobierno de la República y el Gobierno de Michoacán para realizar una reforestación emergente en todas nuestras comunidades.
4.- Requerimos una mesa de trabajo con la CFE para solucionar el problema de cobros excesivos y la falta de una infraestructura adecuada.
