WASHINGTON (AP) — Cunde una gran expectativa por el discurso que dará el viernes el presidente de la Reserva Federal estadounidense, Jerome Powell, en un cónclave de los jefes de los bancos centrales del mundo en Jackson Hole, Wyoming.Temas como la situación en los mercados emergentes, el peligro que conlleva la incipiente guerra comercial entre Estados Unidos y China y las recientes críticas proferidas por el presidente Donald Trump contra el banco central estadounidense por elevar las tasas de interés, son algunos de los temas más acuciantes de la reunión.En particular, los inversionistas querrán saber si alguna de esas circunstancias afectará el plan de la Fed de aumentar las tasas dos veces más este año y otras veces el año entrante.
SI Powell se muestra confiado en que la economía no se verá afectada por los aranceles impuestos por Estados Unidos a los productos extranjeros, o por las represalias que estos aranceles provocaron, o por las crisis monetarias en mercados emergentes, muchos analistas llegarán a la conclusión de que el banco central estadounidense mantendrá su rumbo de aumentar las tasas gradualmente, en respuesta a la robustez de la economía.Pero si Powell da indicios de intranquilidad, ello podría interpretarse como señal de que la Reserva Federal está considerando frenar sus aumentos. Un ritmo más pausado en los aumentos de los tasas de interés sería interpretado como una medida para animar los créditos y préstamos, y por consiguiente el gasto de empresas e individuos, que es la actividad que propulsa el crecimiento económico.En esta nota:
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