Donald Trump está en problemas y los mercados emergentes pueden pagar el costo, de acuerdo con algunos de los administradores de dinero más grandes del mundo.
Enfrentado a un panorama legal y político cada vez más sombrío, el presidente probablemente duplicará su estrategia de distracción de los problemas internos para enfocarse en el extranjero, dijo John Normand, jefe de estrategia fundamental de activos cruzados de JPMorgan Chase & Co. en Londres. Eso podría aumentar su impulso por imponer aranceles más altos sobre US$ 200.000 millones en importaciones chinas, entre otras cosas.
“Sobreponderar a los mercados emergentes en general no es la cobertura de bajo riesgo para un tortuoso proceso de acusación política”, escribió Normand en una nota el jueves, y agregó que tiene mercados emergentes con una “moderada sobreponderación” debido a su valor a mediano plazo.
Trump ha recurrido repetidamente al extranjero en momentos de dificultades internas. En los últimos meses, la Casa Blanca ha impuesto sanciones a países desde Venezuela a Turquía, justo cuando se profundizaban las investigaciones sobre la intromisión rusa en las elecciones y los pagos de dinero para mantener silencio. También se intensificó el ojo por ojo en el comercio con China. El rand sudafricano lideraba las pérdidas de los mercados emergentes el jueves luego que Trump ingresara al candente debate de la reforma agraria del país.
“El motivo detrás de las acciones de Trump es a veces difícil de entender, pero parecer duro para el mundo es algo que va bien con su política de ’EE.UU. Primero’ y es un buen augurio para su electorado”, dijo Pablo Goldberg, administrador de dinero de BlackRock Inc. en Nueva York.
Mike Pence, el primero en la línea para la presidencia si Trump fuera acusado, traería un “grado de certeza significativamente más alto” en el comercio y la política exterior de EE.UU., de acuerdo con Sonja Gibbs, directora sénior en el Instituto de Finanzas Internacionales en Washington. Por definición, ese es un ambiente más acogedor para los mercados emergentes, dijo.
Por ahora, una estrategia extranjera más dura desde Washington podría no perjudicar a todas las naciones en desarrollo. La Casa Blanca probablemente querrá anotarse algunas victorias antes de las elecciones de mitad de período en noviembre, mientras sube la apuesta en otros frentes, como la disputa comercial con China. Un posible ganador: México, donde las autoridades dicen que se ha avanzado hacia un nuevo acuerdo en el TLCAN, dijo Gibbs.
Pero puede ser una excepción.
“Temo el riesgo de contagio a la actividad económica real”, dijo Chris Diaz, administrador de dinero de Janus Capital Management en Denver, citando las medidas de Trump en China y Turquía. “Los mercados emergentes ya estaban bajo cierta presión debido a que la Fed está eliminando la liquidez, subiendo las tasas y algunos problemas idiosincrásicos. Y luego Trump está exacerbando la situación”.
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