“Llegué a las cuatro y media de la mañana y todavía había fuego”, relató Diego Correa, el director de la secundaria número 36 de Moreno. La escuela funciona en un terreno que comparte con la primaria número 32, en el barrio Bongiovanni de Moreno.
“Está todo quemado. Se perdió todo nuestro trabajo y el historial de los alumnos. De la preceptoría sólo quedaron cenizas”, lamentó el directivo.
El procurador general de la Provincia, Julio Conte Grand, confirmó que se hallaron rastros de elementos para iniciar el fuego en dos puntos de la escuela: un pasillo y un archivo. “Se trata de material de plástico, cartón y probablemente un elemento de combustión rápida”, sostuvo el funcionario en declaraciones a C5N. ,
Conte Grand señaló que en Moreno “se van sumando operaciones que hacen pensar que intentan causar conmoción”.
Moreno es un distrito escolar donde lxs docentes viven con miedo y alumnxs y padres están todavía conmovidos.
Este incendio ocurre a dos semanas del violento secuestro de la docente Corina Debonis y a casi dos meses de la explosión de la escuela 49 en la que murieron la vice directora Sandra Calamano y el portero Rubén Rodríguez.
Desde aquel fatídico 2 de agosto, la mayoría de los establecimientos educativos de ese distrito de la zona Oeste del Conurbano están sin clases.
Cecilia, una docente de la secundaria incendiada, confirmó que se quemó la preceptoría y parte de la biblioteca. Contó además que a esa escuela “la levantó” la comunidad. “Fue construida a pulmón, con nuestro trabajo, por las docentes. Nos ayudaron algunos padres y contamos con el aporte de un corralón de la zona”.
“Ante la falta del estado nosotros ponemos de nuestro bolsillo para que los alumnos puedan desayunar”, destaca una maestra
La palabra del directorCorrea cree que el fuego “pudo haber sido intencional” y describió las condiciones precarias en las que funciona la escuela: “Tenemos sólo 4 aulas propias y sumamos dos modulares más un salón que nos presta la primaria y otra que funciona en un pasillo”.En declaraciones a Todo Noticias, Correa confió en poder identificar a los responsables del ataque.
