Jair Bolsonaro, el primer candidato presidencial en las encuestas de Brasil, basa su campaña en un discurso de odio racial, homofóbico, misógino y xenófobo.
Esta semana, los seguidores de Bolsonaro se manifestaron en un desfile militar en las calles del barrio de Copacabana en Río de Janeiro.
La manifestación estaba compuesta exclusivamente por hombres jóvenes y con la presencia de banderas negras con características fascistas.
Bruno Bimbi, corresponsal de TN en Brasil, asegura que un grupo de legisladores presentaron un informe al Ministerio de Defensa para que aclare públicamente si los protagonistas del desfile forman parte de las Fuerzas Armadas o no.
“Los insultos y las amenazas públicas a integrantes de organismos de derechos humanos, partidarios de izquierda, militantes de LGBT, feministas o diputados opositores son recurrentes por parte de los seguidores de Bolsonaro”, agrega Bimbi.
Bolsonaro, en su campaña electoral, amenazó públicamente a los votantes del Partido de los Trabajadores (o “petralada”) con un un fusil en sus manos.
“Vamos a fusilar a la petralada”:
El hijo de Bolsonaro publicó en su cuenta de Instagram una imagen en la que un supuesto opositor con la leyenda “#EleNão” (“Él No”, en referencia a Bolsonaro) está siendo torturado.
“Sobre padres que lloran en la ducha”:El próximo 7 de octubre se va a llevar a cabo la primera vuelta de las elecciones presidenciales de Brasil donde Bolsonaro compite por un lugar en el ballotage con Haddad, el candidato de Lula Da Silva.
