BERLÍN (AP) — La canciller alemana Angela Merkel y el presidente turco Recep Tayyip Erdogan cedieron muy poco terreno en los asuntos que dividen a sus dos países tras reunirse el viernes, pero resaltaron la importancia de que los dos aliados de la OTAN trabajen juntos, mientras buscan mejorar sus ásperas relaciones.Los dos países han diferido sobre numerosos asuntos en años recientes, incluso el encarcelamiento en Turquía de periodistas alemanes y una resolución del Parlamento de Alemania que califica de genocidio la masacre de armenios en Turquía a inicios del siglo XX. Turquía niega vehementemente que haya sido un genocidio e insiste en que fue parte de la violencia de la I Guerra Mundial.
La retórica escaló a tal punto que Erdogan llamó a los partidos principales de Alemania “enemigos de Turquía” y acusó a los funcionarios alemanes de actuar como los nazis, lo que hizo que Merkel condenara sus palabras.
Foto: AP
El viernes, Erdogan ignoró una pregunta de la prensa sobre si se había disculpado por el comentario de los nazis. En lugar de ello, reiteró su demanda de una cooperación más estrecha de Alemania contra grupos que Turquía considera terroristas, incluso los rebeldes kurdos y personas con supuestos vínculos con el fallido golpe de 2016 en Turquía.En esta nota:
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