Honduras.- Las autoridades de Migración de Guatemala reabrieron hoy su punto de registro en la aduana de Agua Caliente, fronteriza con Honduras, por lo que suman centenares los migrantes hondureños que quieren seguir en ruta a Estados Unidos, aunque algunos dicen que van “hasta México”.
Un oficial de Migración de Guatemala dijo a Efe en Agua Caliente que el punto de registro fue abierto este jueves, luego de ser cerrado el martes por la masiva cantidad de hondureños intentando cruzar a ese país vecino, donde al que igual que en Honduras, se ejerce un riguroso control migratorio.
“Si los hondureños traen su documento de identificación no tienen problema, pero debemos registrar adónde van, qué van a hacer, por cuánto tiempo y otra información. Si quieren ir a México o Estados Unidos, deben mostrar su pasaporte con la visa obligatoria”, añadió la misma fuente que pidió la reserva de su nombre.Del lado de Honduras, un fuerte cordón policial con agentes provistos de chaleco antibalas, escudos, bastones de madera y bombas de gas lacrimógeno, se afanan en estar ordenando a los inmigrantes e indicarles que se pongan en filas para que puedan pasar, “solamente si traen su documento personal y van a Guatemala”.En el mismo punto, en el que por momentos los migrantes se alteran exigiendo que se les permita pasar porque llevan su carné de identidad, participan empleados del Instituto Nacional de Migración.Los migrantes hondureños, entre ellos muchos niños acompañados de algún familiar, llegan hasta Agua Caliente, algunos sin saber que ya no es fácil pasar a Guatemala, por lo que algunos terminan haciéndolo por veredas en puntos ciegos.Los que buscan esa vía se arriesgan a ir a dar a un retén policial y militar guatemalteco que los detiene y después reenvía en autobuses a Honduras, hasta la aduana de Agua Caliente.De regreso a su país, como ocurrió con 55 que llegaron anoche a Agua Caliente, un autobús fletado por la estatal Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) les espera para llevarles a San Pedro Sula, norte, la segunda ciudad más importante de Honduras, de donde el sábado partió la caravana con “3.000 migrantes” según la ONU, en ruta a EE.UU..
Un oficial de la Copeco dijo a Efe que entre el miércoles y hasta las 11:00 hora local de este jueves (17:00 GMT) habían despachado cuatro autobuses con 55 personas cada uno, que fueron enviadas a San Pedro Sula, de donde se les “facilita transporte para que se dirijan a su lugar de origen”.Del autobús de este jueves una mujer, llorando, se bajó con dos niños cuando la unidad estaba a punto de arrancar y dijo a Efe que se irían “en el próximo”, sin precisar nada más.Las autoridades hondureñas de migración afirman que los retornados vuelven por “su propia voluntad”, pero varios de los que iban en el autobús que salió este jueves hacia San Pedro Sula afirmaron que fueron “detenidos” por policías y militares en Guatemala y traídos de regreso contra su voluntad.En esta nota:
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