Fitch Group es un líder mundial en servicios de información financiera, en mayo ya había bajado la calificación para la argentina de “positiva” a “estable”. En el informe de noviembre la calificación para la deuda del país volvió a bajar. Ahora paso de “estable” a “negativo”, debido a una actividad económica mucho más débil y perspectivas inciertas con respecto a la sostenibilidad de la deuda. Asegura que la “intensa inestabilidad macroeconomica” en 2018 ha debilitado dramáticamente las perspectivas de crecimiento a corto plazo de Argentina. Fitch proyecta que la deuda del gobierno central aumentará a 93% del PIB en 2018, mientras que en 2017 era del 57%.
Pronostican una caída del 2,7% para el producto de este año, impulsado por un colapso en la confianza y la erosión de los ingresos reales a medida que la inflación se disparó.Proyecta una caída del 1,7% para 2019, en línea con las estimaciones del FMI pero más pesimistas que las del gobierno que lo ubican en un 0,5%.Si bien la agencia asume que el gobierno logrará el ajuste fiscal previsto en el presupuesto y que el programa recientemente renegociado por el FMI lo ayudará a cubrir sus necesidades de financiamiento, ve riesgos a la baja en medio de una recesión económica naciente y un ciclo electoral.
La consultora asegura que las perspectivas de recuperación económica a medio plazo no están claras. Es probable que la inversión privada permanezca cautelosa en medio de la incertidumbre macroeconómica y política.