Morelia, Michoacán.- Luego de que el día de ayer, el Gobierno de Michoacán decidiera retirarse del convenio federal de recursos en materia de educación pública básica, el gobernador del estado, Silvano Aureoles Conejo, no descartó que el sector salud pueda tener el mismo destino, debido a los constantes adeudos que mantiene el gobierno con los trabajadores.
“El sector salud no canta mal las rancheras”, hizo alusión.
El mandatario estatal detalló que los problemas de deudas con el sector comenzaron cuando la propuesta del seguro popular impulsado por él es presidente Vicente Fox se convirtió en ley. Sin mencionar cuándo, dijo que, en un periodo de Gobierno estatal, se contrataron a cuatro mil personas, dando por hecho que los pagos correrías por el gobierno federal a través del seguro popular; en ese momento, dijo en Michoacán creció la nómina y la masificación “por mayoría”, además de que el 41 por ciento del presupuesto era para el pago de nóminas, por lo que en Michoacán quedó un boquete administrativo de aproximadamente mil 200 millones de pesos.
Según Aureoles Conejo en el sector existen dos trabajadores administrativos por uno relacionado a la salud debido a la “irresponsabilidad de hacer crecer la nómina”.
Agregó que, si bien el problema con los pagos es grave, aún puede resolverse, sin embargo, el poder Ejecutivo de Michoacán está a la espera de las decisiones que tome el gobierno federal entrante Con respecto al seguro popular.
