En el edificio de la Comandancia en Jefe del Ejército, en calle Tupper, se constituyó en horas de esta mañana el Fiscal Metropolitano Sur. Raúl Guzmán. El objetivo de su visita es tomar declaraciones al comandante en jefe, general Ricardo Martínez, por la venta de armas a narcotraficantes que denunció el propio jefe militar.
Al fiscal Guzmán –quien fue nombrado por el Fiscal Nacional para indagar esta arista- lo acompañan en esta diligencia los fiscales Cristian Galdames y Claudio Orellana, con el objetivo de recabar la información que involucre a funcionarios del Ejercito en servicio activo o en retiro en estos ilícitos.
La indagatoria fue abierta tras conocerse un audio de una actividad del general Martínez –en una reunión con oficiales de la Guarnición Militar de Santiago- donde admite que “tenemos información de que hay oficiales y cuadro permanente que compra armas por la vía legal, que después las dan por perdidas, pero que lo que están haciendo es venderlas a grupos de narcos, de delincuentes”.
El comandante en jefe del Ejército fue obligado a dar explicaciones públicas sobre el tema y precisó que la institución está llevando a cabo una investigación interna que apunta a 5 suboficiales. “Con la inteligencia militar tenemos indicios de que podría ser que compraban armas y después las daban por perdidas para venderlas”, señaló Martínez, quien también debió comparecer ante las comisiones de Defensa de la Cámara de Diputados y el Senado para precisar sus dichos.
