Orientado a impulsar, sistematizar y generar políticas públicas para lograr la igualdad de género en el país, el mandatario presentará en sociedad un nuevo plan de cara a erradicar las brechas de género que atraviesan distintas áreas de la Argentina. Aprovechando este impulso, más mediático que sustantivo, el Gobierno dará a conocer una nueva propuesta de las pocas y desarticuladas iniciativas realizadas desde su llegada al poder (adscribió a compromisos internacionales como el punto 5 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y “25 by 25” referido desde el Grupo de los 20).De hecho, fue en el marco de un evento del Grupo de Trabajo de Mujeres de Negocios mantenido hace algunas semanas que se presentó la Iniciativa de Paridad de Género (IPG), alianza público – privada que buscará reducir las brechas de género en el mercado de trabajo.
¿Qué son las brechas de género y cómo repercuten en el mercado laboral?
La inserción laboral de las mujeres difiere marcadamente de la de los hombres. En promedio, según las Naciones Unidas trabajan proporcionalmente (28,5%, contra el 9,2% de los varones) un menor número de horas, siendo proclives a cumplir jornadas laborales de hasta 20 horas laborales. Cuando hablamos de brechas de género entonces hacemos referencia al hecho de que las mujeres enfrentan más obstáculos que los varones para insertarse plenamente en el mercado de trabajo.
En tal sentido, toma relevancia además un contexto económico como el que atraviesa la Argentina. Explica Gala Díaz Langou, directora del programa de Protección Social de Cippec.
“Durante las recesiones económicas, los obstáculos que enfrentan las mujeres para insertarse plenamente en el mercado de trabajo se exacerban”
En adición a este, otro de los contrapuntos es que las mujeres transitan dificultades para alcanzar puestos de liderazgo. Los “techos de cristal” pueden comprenderse a partir del hecho de que los avances normativos tendientes a promover la inclusión de las mujeres no han implicado transformaciones culturales, sociales o políticas en este sentido.
La paridad política de género, entendida como una medida definitiva que reformula la concepción del poder político y lo conciba igualitariamente entre hombres y mujeres, está cobrando cada vez mayor relevancia.Será entonces primordial el comenzar a acompañar y modificar los diagnósticos realizados con acciones concretas. Esperemos que este no sea sólo un anuncio.
