Escándalo de corrupción fuerza la renuncia de ministro de Jair Bolsonaro



Una nueva polémica afecta al régimen de Jair Bolsonaro el que ahora sufre la salida del ministro de la secretaría general de la presidencia, Gustavo Bebianno, tras verse involucrado en una denuncia de corrupción por el desvío de fondos públicos para financiar campañas.Fue el diario Folha de Sao Paulo el que destapó el escándalo de corrupción, en el que denunció el uso ilegal de dineros fiscales para las elecciones de 2018, reportaje en el que también aparece vínculado a la situación el ministro de Turismo, Marcelo Álvaro Antônio.La dimisión de Bebianno, expresidente del oficialista Partido Social Liberal (PSL), al que pertenece Bolsonaro, abre muchos flancos para el nuevo gobierno de Brasil, y ocurre a tan solo 49 días de haber asumido.Más allá de la trama de corrupción en si misma, que consiste en la supuesta creación de candidatos “fantasma” con el objetivo de recibir fondos electorales indebidos durante las legislativas de octubre, este caso ha mostrado un profundo quiebre entre sectores del partido y nada menos que los hijos de Bolsonaro, los que han tomado un rol en el régimen que ha incomodado a distintos sectores que llegaron al poder junto con ellos.El conflicto, particularmente entre Carlos Bolsonaro y el ahora exministro Gustavo Bebianno, viene desde hace meses, pero el punto culmine llegó cuando este último trató de bajar los humos de la crisis por el destape del caso de corrupción señalando que había hablado varias veces con el presidente, desde la revelación del escándalo. Pero Carlos lo trató de mentiroso y lo mostró unos audios de Whatsapp para “quitarle piso” a los dichos de quién era una de las pocas figuras con “manejo político” en el régimen.Por su lado, y acorde a lo reportado por el diario O Globo, Bebianno, quien era considerado uno de los hombres más cercanos a Jair Bolsonaro, le habría dicho a un aliado que el gobernante está loco y es una persona peligrosa para el país. El exministro le confesó que “Perdí la confianza en Jair y tengo vergüenza de haberle creído”. Estas declaraciones han generado mucho ruido y abierto la sospecha de que el extitular del PSL conoce algunas informaciones altamente perjudiciales para el Presidente.Pero eso no es todo en Brasil. También se ha desarrollado en estos días las primeras grandes manifestaciones, detonadas por el asesinato de un joven negro de 19 años, Pedro Gonzaga, quien fue inmovilizado y ahogado por el guardia de un supermercado en Río de Janeiro. En reacción a este hecho, desde el fin de semana, se han realizado protestas y diversos actos en Sao Paulo, Belo Horizonte, Fortaleza, Recife y Río.El asesinato de Gonzaga fue grabado, y se aprecia a Davi Amâncio, el guardia que lo mató con una llave que lo asfixió. En el registro se puede ver como la gente le pide que deje ir al joven, incluso se puede escuchar a una mujer gritando y advirtiendo que “él lo está asfixiando”. El malestar por la violencia desmedida y la difusión de la grabación, culminó en el uso en redes sociales del hashtag #VidasNegrasImportam, contra la violencia hacia la población negra, homologando el usado en USA #BlackLivesMatter.En definitiva no ha sido un buen comienzo para Jair Bolsonaro, quién ya vivió hace unas semanas otro escándalo que involucró a su hijo mayor, Flavio, quien se vio envuelto en otro caso de corrupción por financiamiento irregular, el cual finalmente pudo evadir gracias al fuero otorgado por su reciente cargo parlamentario, en una cuestionada decisión de un juez que decidió validar ese fuero incluso antes de que asumiera en efecto el hijo del Presidente.



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