Morena y la «comida fifí» para unificar a sus grupos en Sinaloa



Por demás interesante la «comida fifí» del viernes, que los más altos representantes de los grupos de poder de Morena Sinaloa celebraron en el restaurante Los Arcos, para fumar la pipa de la paz.El suceso fue confirmado en su columna del domingo en EL DEBATE por la doctora Tere Guerra, mujer de izquierda de toda la vida, cuyo diagnóstico de la vida morenista en nuestro estado es demoledor: «Un día se descalifican y otro se reconocen; primero se atacan y luego se reúnen. Han sido rudos en sus adjetivos y acusaciones internas en Morena, y, sin embargo, están obligados a caminar juntos en bien del Gobierno de AMLO».Cierto: los peores calificativos hacia las figuras de Morena provienen de morenistas. He ahí la importancia de esta demostración de unidad en la que se reunieron alcaldes, legisladores locales y federales, el coordinador de delegaciones Jaime Montes y el delegado nacional del partido en nuestro estado, Ignacio Mier Velazco, diputado federal por Puebla y personaje tan poderoso que actualmente funge como presidente del Comité de Administración de la Cámara Baja; es decir, quien está a cargo de los dineros en San Lázaro.Esperemos que esta comida, aunque desmienta aquello de la «austeridad republicana» del morenismo, contribuya a mejorar el ambiente interno estatal en el partido hegemónico del México actual.MIENTRAS TANTO, LOS PRIISTAS… Atento, sonriente, complacido, diríamos que hasta orgulloso, lució el gobernador Quirino Ordaz durante el discurso oficial del Día de la Bandera, que correspondió presentar al secretario de Pesca y Acuacultura, Sergio Torres Félix.El mandatario estatal encabezó la ceremonia del domingo donde Torres, al hablar en nombre de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, señaló que «la bandera simboliza la unidad y los principios de libertad y justicia, en los cuales los mexicanos encontramos nuestro pasado para mirar con orgullo nuestro futuro».Una de las partes del discurso que llamaron mayormente la atención fue cuando Torres Félix dijo que «la gente quiere ver a los servidores públicos en las calles, en los mercados, en los ranchos, en las colonias, en los campos pesqueros; la gente no los quiere en las cómodas oficinas con aire acondicionado», una encomienda que —subrayó— los funcionarios han recibido del gobierno quirinista.Gracias al liderazgo de Quirino Ordaz —agregó—, Sinaloa está en marcha: «Hoy se construyen hospitales, estadios; se pavimentan calles, se atraen inversiones, se entregan miles de becas a jóvenes estudiantes; se apoya a las mujeres, a grupos vulnerables; se trabaja a favor de todos, especialmente de los más necesitados».Sobra decir que la intervención del secretario de Pesca fue por demás aplaudida. En resumen: el día de ayer marcó otro punto a favor de Sergio Torres, quien estuvo, como dijera él, «al cien».OBRA EN SALUD. En una de sus acostumbradas visitas sorpresa a las unidades de servicio público, el gobernador Quirino Ordaz corroboró el año pasado las lamentables condiciones en que opera el Centro de Salud de Culiacán. Allí se propuso sustituirlo, en el mismo lugar, pero con instalaciones modernas y con mayor capacidad de atención. La obra ya está en puerta, y así lo dio a conocer ayer el mandatario estatal, luego de plantear el proyecto de remodelación al presidente Andrés Manuel López Obrador en su más reciente gira por el estado. La inversión será de 164 millones de pesos. Por otra parte, el gobernador instruyó para que se destinen, desde ayer mismo, cinco millones de pesos de manera extraordinaria para equipar con 40 nuevas camas al actual Hospital General de Culiacán, mejorar la unidad de rayos X y robustecer el abasto de medicinas. Ello, mientras la construcción del nuevo Hospital General continúa a toda marcha. Enhorabuena.



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