La OCDE manifestó apoyo a la reforma tributaria del Gobierno

El director del Centro de Políticas y Administración Tributaria de la OCDE, Pascal Saint-Amans, tras reunirse con el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, expresó que “soy muy feliz de confirmar que apoyamos firmemente el proyecto de reforma tributaria”.Cabe recordar que en el mes de enero, el mismo Saint-Amans publicó una carta en la que comentaba sobre el proyecto de reforma que impulsaba el Ejecutivo, y en ese entonces valoró los puntos fundamentales del proyecto.Luego de la cita con el secretario de gobierno, el experto francés expresó que “veo algunos retos en la integración completa, volviendo a un sistema más conocido por los países del mundo, lo que puede tener un impacto positivo. Pero muchas otras medidas en la reforma contribuirán al crecimiento y al empleo. Lo vemos de forma positiva desde la OCDE. Es un desafío, las reformas tributarias siempre son difíciles, pero estamos confiados que los aspectos positivos del proyecto del Gobierno deberían tener un impacto positivo”.Según Emol, los puntos más valorados por la OCDE fue que el Gobierno aceptara aumentar la tasa de impuestos digitales al 29%, pues Felipe Larraín afirmó que será el IVA a los servicios digitales, no será un impuesto específico, sino que el concepto es que es el mismo IVA al que están sujetos todos los regímenes”. Hecho por el cual se eliminaría la estructura inicial que tenía este impuesto en el proyecto.Además, Saint-Amans enfatizó en que “Queremos desarrollar reglas comunes entre los países para asegurarnos que las compañías que venden bienes o servicios a través de medios digitales estén expuestos a los mismos regímenes arancelarios que las compañías locales”.El ministro Larraín llamó “a los parlamentarios, quienes están escuchando y a quienes tantas veces citan a la OCDE, a que escuchen también a la OCDE en este tema, porque creo que uno no puede citar a la OCDE en algunos temas y hacerse el sordo en otros”.Finalmente, representante gubernamental indicó que “Queremos llegar a un acuerdo lo más amplio posible, tan amplio como sea la voluntad de las personas involucradas. Si hay alguno que nunca quiso aprobar la idea de legislar, no lo podemos forzar. Esto es como el tango: se necesitan dos y creo que uno no puede forzar a la otra parte a bailar”.

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