Recomendaciones para evitar piedras en los riñones

Chilpancingo.- Consumo alto en proteínas, sal y mínima ingesta de agua natural son las causantes principales de la litiasis renal, piedras en los riñones, y que afectan a población en todos los grupos de edad, informó la Delegación Guerrero del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).En el Hospital General Regional (HGR) No. 1 Vicente Guerrero del IMSS en Acapulco, la litiasis renal es el segundo padecimiento de este órgano que más se atiende en Nefrología.El nefrólogo del HGR N° 1, Anwar Hernández Paz y Puente, explicó que la litiasis renal o cálculos en el riñón se forman cuando la orina contiene una gran cantidad de sustancias que pueden crear pequeños cristales que al acumularse se convierten en cálculos o piedras.Pueden no manifestar síntomas hasta que comienzan a bajar por los conductos (uréteres) a través de los cuales la orina sale de la vejiga. Cuando esto sucede, los cálculos pueden bloquear el flujo de orina fuera de los riñones.

Lo recomendable es tomar muchos líquidos. Foto: Cortesía

El médico explicó que esto ocasiona hinchazón del riñón o los riñones, provocando dolor, el cual generalmente es fuerte. La intensidad del dolor está generalmente relacionada con el tamaño del cálculo. En ocasiones se produce su expulsión casi sin sintomatología.Los cálculos de calcio son los más comunes y se desarrollan con mayor frecuencia en los hombres, generalmente entre los 20 y 30 años de edad. Los factores de riesgo que influyen en la formación de las piedras en el riñón son: el elevado consumo de alimentos ricos en calcio (productos lácteos) o proteínas (carnes rojas), pero el factor más importante es tomar poca agua, ya que ésta ayuda a eliminar los minerales y así inhibir la formación de cristales.Entre los síntomas se encuentran: dificultad para orinar, fuerte dolor abdominal o en la espalda, cólicos o espasmos; escalofríos, náuseas, vómito y sangre en la orina.Para el diagnóstico de este padecimiento, en el Seguro Social se realizan estudios con ultrasonido y radiografías; además de los exámenes de laboratorio, como un cultivo de orina, ya que suele asociarse con infecciones en el sistema urinario.

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