El presidente de la Asociación de Fiscales, Claudio Uribe, asumió que el conflicto entre el fiscal Sergio Moya y su superior jerárquico Emiliano Arias “lesiona” la imagen del Ministerio Público, pese a que evitó hablar de crisis al interior de la institución y señalar que se trata de un caso “aislado”.
El fiscal adjunto de Valparaíso, si bien consideró que “la transparencia es un valor importante”, cuestionó la sobreexposición del caso, señalando a Radio Cooperativa que “seguir ventilando cada detalle por los medios no sé si aporta algo (…) es un exceso”. Se trata de un caso que ha estado marcado por las filtraciones y la férrea defensa mediática que ha hecho Arias de su persona en los medios de comunicación, el Ministerio Público decidió abrir una investigación administrativa contra Arias, la cual fue dejada en manos del fiscal regional de Antofagasta, Alberto Ayala, mientras la arista penal fue encargada al fiscal regional de Magallanes, Eugenio Campos, el mismo del millonario fraude de Carabineros.
Cabe recordar que Moya denunció a Arias ante el Fiscal Nacional Jorge Abbott por tráfico de influencias en la arista del síndico Herman Chadwick en el caso Caval, obstrucción en la investigación contra el juez de la Corte de Apelaciones Mario Elgueta, ocultamiento en la causa del Teatro Regional de Rancagua y violación de secreto en una causa de Puerto Montt.
El caso también ha puesto en entredicho el liderazgo de Jorge Abbott al mando del Ministerio Público, tomando en cuenta que no ha sido capaz de controlar que el caso escalara llegar a sumir a la institución en su peor crisis desde la puesta en marcha de la Reforma Procesal Penal.
Con todo, Uribe descartó que este caso sea producto de una falta de fiscalización interna en la institución, y desechó la idea reflotada en el Congreso de extender la posibilidad de una acusación constitucional hacia el fiscal nacional y los fiscales regionales.
“Es una idea peregrina que el poder político trate de involucrarse en el mundo de los fiscales de esa manera, nosotros investigamos políticos (…) Tenemos bastantes controles, internos por un lado, tenemos que informar al Senado de lo que hacemos, tenemos fiscales denunciados que han sido investigados (…) no es un problema de control”, indicó.
