Investigan anomalías en vacunación masiva en un colegio de Puente Alto



La Seremi de Salud y la PDI están investigando una denuncia de apoderados del colegio Alicante del Valle en Puente Alto en contra de una enfermera a quien acusan de haber utilizado la misma jeringa y aguja en varias personas en una vacunación masiva contra el virus de la influenza.El hecho ocurrió el sábado. Más de 300 estudiantes fueron inoculados hasta que una apoderada que se desempeña como paramédica denunció que la profesional habría vacunado a dos de sus hijos con la misma jeringa.Según explicaron apoderados al matinal Muy Buenos Días, tras esto la encargada se negó a mostrar el contenido de las vacunas ni el recipiente con las jeringas descartadas.”Las jeringas nunca venían cerradas, ella sacaba jeringas que ya venían listas y las inyectaba”, explicó una de las apoderadas. Otra explicó al mismo medio que la enfermera en vez de desechar la jeringa la habría metido en el recipiente donde guardaba el resto de las vacunas.El alcalde de Puente Alto, Germán Codina, explicó que “hay 745 personas que habrían sido vacunados por la enfermera”, agregando que el procedimiento no tiene nada que ver con la municipalidad, debido a que se realizó de forma particular. Sin embargo, se pondría a disposición “los equipos médicos y también abogados, porque nos interesa seguir una línea penal contra esta persona”.Un caso fatalLos apoderados habían decidido realizar una campaña preventiva tras la muerte por influenza de un alumno de tercero básico del mismo establecimiento particular subvencionado. Esta consistía en jornadas de vacunación para estudiantes, apoderados y profesores del colegio.De esta forma, la profesional habría sido contactada a través de internet por uno de los apoderados de forma particular, cobrando 7 mil pesos por procedimiento.La jornada de vacunaciones debía durar tres semanas, realizándose cada sábado. De esta forma la enfermera habría realizado la primera jornada el sábado 28 de junio. Sin embargo, ese día no hubo reclamos de esta índole, como sí sucedió este 6 de julio.Ante las denuncias ayer funcionarios de la Seremi acudieron al colegio para recabar antecedentes y aclarar si ocurrieron las irregularidades descritas.Tras esto, la seremi de Salud, Rosa Oyarce, confirmó que están realizando una indagatoria sobre el caso: “Lo primero es saber cuánta gente se vacunó; luego saber qué tipo de vacunas se tenían en el lugar; y también se esclarecerá si efectivamente se utilizó el mismo material para diferentes personas, es decir, si utilizaron las mismas jeringas, las mismas agujas”.La autoridad sanitaria recalcó que todavía se está realizando un levantamiento de los antecedentes, sin embargo confirmó que la enfermera “adquirió las vacunas, están compradas, hay evidencia, pero el resto no lo tenemos”.Además, Oyarce afirmó que el caso está siendo investigado de forma paralela por la Fiscalía, debido a la denuncia de apoderados en la PDI donde acusaron a la mujer de haber utilizado la misma jeringa y aguja en al menos 50 personas.Ayer, detectives acudieron al domicilio de la profesional, sin embargo, desde la PDI rechazaron referirse al caso debido a que trata de una investigación en curso.A pesar de que la Seremi realizó un llamado a la calma y a esperar los resultados de las investigaciones, se solicitó monitorear los síntomas de las personas vacunadas. Los niños podrían presentarlos en dos o tres meses más, mientras que los adultos están expuestos a mayores peligros, por lo que les recomendó que se hagan exámenes de sangre en los próximos días.



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