Si bien el Gobierno apuesta a un trámite expedito de la Reforma Tributaria en el Congreso, las dudas sobre este proyecto emblemático del Ejecutivo siguen instaladas con fuerza, más aún a la luz de las últimas cifras de la Operación Renta.
En efecto, los números revelaron que la tributación registró un aumento de 16,2%, pasando de US$ 14.127 millones a US$ 16.411 millones.
Para el ex director del Servicio de Impuestos Internos, Michel Jorratt, estos resultados refutan los motivos del Gobierno para impulsar una nueva reforma tributaria, dado que con el actual esquema sí se está recaudando lo esperado pese a las críticas del oficialismo a la complejidad del esquema tributario imperante.
“Los argumentos para sostener una nueva reforma (como la que está planteando el Gobierno) se están cayendo”, dijo el economista, uno de los cerebros de la anterior reforma tributaria, diseñada en el período de Michelle Bachelet.
“Sí se está recaudando y la supuesta mayor complejidad de la reforma no se nota en las cifras que tenemos del costo de cumplimiento de las empresas” , indicó a El Mercurio.
A juicio de Jorratt, una nueva reforma tributaria no se justifica y atribuyó el proyecto del Gobierno a “querer volver a un sistema integrado para reducir la carga tributaria de las rentas empresariales”.
En ese escenario, criticó la tramitación que ha tenido el proyecto y las indicaciones ingresadas por el Gobierno, señalando que “es bien a la rápida todo lo que se está haciendo en la materia”.
En cuanto a la integración, comenta que “me molesta que se trata de decir que integrar es progresivo. Dudo que en la historia de las reformas tributarias hasta la fecha haya una mediad más regresiva que ésta. Es decir, se fuerzan los argumentos para defender algo que es insostenible. Las mismas cifras que da el Gobierno muestran que la integración es regresiva”.
Las críticas de la oposición
El proyecto de modernización tributaria es retomado hoy en la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, donde el presidente de la instancia, el diputado Daniel Núñez (PC), sigue manteniendo su rechazo a la reintegración tributaria, propuesta por el Gobierno.
Núñez consideró incomprensible desmontar la reforma del Gobierno anterior considerando que en la última Operación Renta hubo un aumento en la recaudación de tributos.
Mientras en el Senado, figuras influyentes en estas materias como el socialista Carlos Montes, también mantienen su rechazo, al plantear que “la integración es inaceptable, es una mala reforma y el gobierno insiste en este proyecto que no tiene mayor impacto ni en crecimiento ni en inversión”, según dijo a Radio Duna.
Pese al acuerdo entre el Gobierno y la DC, los contenidos de lo pactado no están del todo claros, como lo demuestran los dichos del diputado Pablo Lorenzini, integrante de la Comisión de Hacienda de la Cámara.
Lorenzini propone una nueva alternativa: “Saquemos la integración y por último si el Presidente de la República le prometió a los empresarios en su campaña bajarle dos puntos, de 27 a 25% los impuestos, hagamos una cosa intermedia, bájeles un punto, US$400 millones y eso sale y avanzamos en todo lo positivo y no nos enredamos en estas otras cosas”.
