Los Mochis, Sinaloa.- Las políticas que está aplicando al campo mexicano el actual gobierno federal están conduciendo al desastre a la agricultura comercial de México, advirtió hoy Marte Vega Román en la presentación de su primer informe de labores en la presidencia de la Asociación de Agricultores del Río Fuerte Sur.Ante representantes del gobierno federal, estatal y municipal encabezados por el secretario de agricultura del Gobierno del Estado, Manuel Tarriba Urtusuastegui; Jaime Montes, delegado en Sinaloa del Gobierno federal y legisladores encabezados por el senador Mario Zamora Gastélum, Vega Román manifestó que ha quedado claro que el principal objetivo del nuevo gobierno federal es apoyar a la agricultura de subsistencia del país, lo cual no rechazan, pero debe recordar que la agricultura que alimenta a la nación es la comercial y no la de subsistencia.
“El presidente de la República nos ha dejado claro en sus declaraciones y acciones que el objetivo de su gobierno es de apoyar casi exclusivamente a la agricultura de subsistencia; estamos de acuerdo que se apoye este estrato de la población; sin embargo, debe reconocer el gobierno federal que la agricultura de subsistencia no alimenta a nuestra nación, la producción que alimenta a nuestro país proviene de la agricultura comercial, la cual están condenando al desastre de insistir en la aplicación de la política.Dio a conocer que desde la propuesta original del presupuesto para el campo del 2020, los organismos agrícolas del sector privado y social no estuvieron de acuerdo, encabezados por el Consejo Nacional Agropecuario y la Caades y se realizó un frente común de protesta y de gestión ante todos los niveles de gobierno y ante la Cámara de diputados buscando que se aprobaran apoyos específicos para la agricultura comercial; sin embargo, los resultados no fueron satisfactorios ya que terminaron autorizándose solamente 47 mil 577 millones de pesos a la Sader, el menor presupuesto al campo desde el 2006 y muy por abajo de los 65 mil 465 millones de pesos autorizados en el 2019.Con este recorte federal de casi 18 mil millones de pesos desapareció el programa de apoyos a la comercialización, mismo que durante los últimos años habia dado certidumbre y rentabilidad a los productores agrícolas a través de la Agricultura por Contrato, Ingreso Objetivo, y Coberturas de Precios, con los cuales podían competir con los productores de otros países quienes reciben grandes apoyos para incentivar la producción de alimentos.“La percepción del gobierno federal sobre la agricultura comercial es que no necesita apoyos; sin embargo, tenemos que demostrar que si se requieren recursos gubernamentales que garanticen un ordenamiento de los mercados con estrategias de comercialización para vender nuestras cosechas por encima de los costos de producción, a precios justos que nos permitan obtener una rentabilidad mínima y con ello contribuir a la autosuficiencia de alimentos en nuestro país”.El líder de los agricultores en la zona norte del estado señaló que ante este panorama tan complicado, es necesario generar políticas públicas diferenciadas que separen los ámbitos social y productivo del campo y que a cada esfera se le brinde el tratamiento que requiere.Entendemos que estamos inmersos en un contexto global de mercados y de libre competencia, pero a nuestro sector todavía le falta mucho para ser realmente competitivo frente a las grandes potencias agrícolas.En México se debe estructurar una política sectorial que se le de certidumbre al campo ante las fluctuaciones del mercado, una politica de largo plazo, dotada de mecanismos de protección contra los embates de la naturaleza y la fragilidad de los precios.Si no actuamos unidos y de una manera proactiva el presupuesto 2020 traerá como consecuencia problemas de comercialización, liquidez, cartera vencidas, implicaciones sociales y el deterioro de la autosuficiencia alimentaria.
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