El 4 de marzo del año 2000 Sony lanzaba en Japón la sucesora del sorpresivo fenómeno que fue PlayStation, y creaba una nueva revolución en el gaming con una consola que, como su antecesora, era mucho más que una mera máquina de juegos: Sony volvía a montarse sobre los hombros de una nueva tecnología y convertía a PlayStation 2 en un verdadero centro multimedia, y el reproductor de DVD más económico de la época.La compañía venía cargada de confianza por su dominación absoluta durante la generación anterior de consolas y eso quedaba reflejado en todos los aspectos de PlayStation 2. La máquina abandonaba su estética más “de juguete” para convertirse en un imponente bloque negro con luces de colores y el logo marcado a fuego en la parte superior. Incluso el packaging reflejaba ese momento: una enorme caja azul que ni mostraba la consola sino que sólo incluía el logo. Sony estaba en su momento y, con justicia, derrochaba ego.
La interfaz de usuario también evolucionó para volverse una demo en sí misma, presentando partículas flotantes y cubos de cristal transparente, y haciendo gala de las posibilidades técnicas del sistema. Sony comenzó a ponerse “serio” para alejarse lo más posible de la competencia (en particular de Nintendo, siempre identificado con conceptos más infantiles) y crear su propia identidad, con una melodía y animación de inicio que quedó marcada en la memoria de millones de usuarios.
Ken Kutaragi, el padre de la bestia
Pero lo importante, como siempre, son los juegos. Y PlayStation 2 se convirtió en la casa de algunas de las franquicias más influyentes de la historia de los videojuegos, como Grand Theft Auto, que pegó el salto de las dos a las tres dimensiones en la consola de Sony con Grand Theft Auto III, un juego que creó un género en sí mismo, y luego empujó la posibilidades del sistema a los límites con Grand Theft Auto: Vice City y más tarde con Grand Theft Auto: San Andreas, un proyecto masivo que era impensado al comienzo de la generación.
Como Super Nintendo en tiempos de 16 bits, PlayStation 2 contiene un catálogo plagado de clásicos, que son por muchos considerados como algunos de los mejores juegos de todos los tiempos: además del mencionado San Andreas, destacan Shadow of the Colossus, Metal Gear Solid 3: Snake Eater, Pro Evolution Soccer 6, Okami, Guitar Hero 2, God of War II, Devil May Cry 3, Final Fantasy X, Silent Hill 2, Gran Turismo 4 y muchos más, todas exclusividades junto a sagas como Ratchet & Clank, Jak & Daxter, Sly Cooper y Twisted Metal, que hoy parecen imposibles de replicar.PlayStation 2 se encontró en medio de una tormenta perfecta, con la industria de los videojuegos en pleno crecimiento, una lenta caída del gaming en PC, un sistema que por precio y calidad parecía imposible y una flexibilidad de uso que, sumada a los presupuestos moderados, abría la puerta a mucha experimentación, que nos dió clásicos de culto como Katamary Damacy, Ape Escape, Odin Sphere y Rez, por nombrar algunos. También fue la época de los accesorios, con cámaras, micrófonos, instrumentos de plástico, nuevas metodologías de control. Todo valía en una consola que era pan caliente y que tenía un público para cada proyecto.
Sin contar las muchas versiones especiales, hubo dos versiones principales de PlayStation 2: la tradicional (conocida como “Fat” o “Gorda”) y el modelo Slim (“Delgada”) lanzado en 2004. que era en sí misma una maravilla de tecnología. La original ofrecía compatibilidad con un adaptador de red para conectarse a internet, pero el segundo modelo traía la conexión incluida de fábrica y no sacrificaba ninguna de las funciones de su hermana mayor con una fracción del tamaño.
Por eso no sorprende que, aún sin haber sido la plataforma más poderosa de su generación, PlayStation 2 sea la consola más exitosa de la historia, con más de 155 millones de unidades vendidas en sus 13 años de vida — la consola se discontinuó en 2013, seis años después del lanzamiento de su sucesora, PlayStation 3.
Los dos modelos de PlayStation 2
Ni siquiera la Wii, que generó una ola de consumismo colectiva durante años tuvo las piernas que tuvo la segunda consola de Sony, en particular porque el impacto de PlayStation 2 en el software fue igual de impresionante.El fenómeno de PlayStation 2, en tiempos en los que las consolas como objetos físicos de juego continúan cayendo en la irrelevancia frente al advenimiento de los servicios de streaming, parece irrepetible 20 años después.Para muchos fue su primer consola, para otros la que marcó un momento trascendental de su vida. Para todos será “la Play”.En esta nota:
