La verdadera epidemia, los femicidios: una mujer es asesinada cada 14 horas



Sus nombres dan vueltas por los medios de comunicación. Las mujeres víctimas de femicidios otra vez protagonizan las portadas de los diarios. Una y otra vez, los detalles morbosos de sus asesinatos se repiten. La crueldad y la saña con la que parejas o ex parejas de las víctimas, presuntos culpables de estos femicidios, terminaron con la vida de estas chicas, da escalofríos. Existe un protocolo para tratar estos casos en diarios, televisión y revistas, pero pocos medios lo acatan. Los nombres, sus caras, fotos sexualizando a las víctimas mientras los acusados de los crímenes gozan de un regio blureo pues presunción de inocencia, abundan. Todo lo que sucede alrededor de los femicidios está mal. Pasaron sólo tres días de marzo que es, paradójicamente, el mes de la mujer. En esos tres días, cinco mujeres fueron asesinadas y casi todos los acusados son parejas o ex parejas de las víctimas. O sea, el vínculo se suponía amoroso y aunque el amor romántico está atado a estas prácticas por fomentar la posesión, los celos y el dolor, de amoroso, nada. En esta nota, la cara de las víctimas, para que esos números se transformen en vivencias, pero también los nombres de sus acusados, para que resuenen y sirvan como antecedente. Cabe destacar que estos números, chequeados y reconfirmados tanto por el observatorio de femicidios de “Mumalá” como de “Ahora que sí nos ven”, son solo de los casos que salen en los medios de comunicación. 

La joven fue lanzada desde un séptimo piso, en pleno centro de la ciudad, luego de haber sido golpeada por Bernardo Luis Baraj, de 50 años quien fue detenido en el lugar. 
El acusado, oriundo de Ushuaia, vivía en Buenos Aires y llegó a Mar del Plata en el verano. Se habrían conocido el domingo 1 de marzo en el Bingo de la ciudad.  
En el momento del hecho, efectivos policiales detuvieron a Baraj cuando intentaba escapar del departamento, ya que no tenía llave del lugar.”Se puso como loca y se tiró”, habría dicho el hombre al personal policial antes de quedar detenido. Pero los peritajes y la autopsia indicaron que ese argumento era falaz y que el acusado, antes de arrojarla, ya la había asesinado. 

Otro femicidio. Fue en Mar del Plata. Este es el acusado. Se llama Bernardo Baraj. Lo acusan de haber asfixiado a Jordana Belen Rivero para luego tirarla desde un séptimo piso de un edificio de la calle Salta al 1500. Se habían conocido en el Bingo. pic.twitter.com/6xDVhaO3dN
— Mauro Szeta (@mauroszeta) March 3, 2020

Por el crimen se entregó su novio, Naim Vera, de 19 años, quien confesó haberla asesinado y luego arrojado partes del cuerpo en un contenedor de basura y en la ruta. Los jóvenes habían llegado el sábado cerca de las 4 de la madrugada a un departamento ubicado frente a la Universidad Nacional de Catamarca, en la capital provincial. 
Según le relató el propio Vera a las autoridades, la pareja comenzó a discutir por un presunto embarazo de la víctima, aunque la autopsia luego lo desestimó. Él alegó que ella cayó por las escaleras en el medio de la pelea y ahí murió, sin embargo, las pericias indicaron que la asesinó antes. 

Naim Vera, de 19 años, confesó haber asesinado a Brenda Micaela.

Guadalupe fue brutalmente asesinada a golpes y luego calcinada. Fue atacada sexualmente por su primo de 22 años y al resistirse a ser abusada, el femicida la asesinó. Luego, él confesó el crimen ante un familiar. La nena estaba desaparecida desde el domingo y era intensamente buscada por su familia. 
La noche de su desaparición, su madre había denunciado en la comisaría de Lobos que la niña no había regresado a la casa. Ese mismo día, Sergio Ramón Oliveira la había pasado a buscar para llevarla a un cumpleaños.

Sergio Ramón Oliveira confesó haber abusado y asesinado a Guadalupe.

Había desaparecido el viernes 28 de febrero. Su hermana hizo la denuncia en la comisaría. Su cuerpo fue encontrado casi cinco días después, enterrado a 50 centímetros de profundidad, en el patrio trasero de una finca.
El dueño de la casa era su presunta ex pareja, Balvino López, un hombre de 45 años que, al parecer vivía con ella. 

La adolescente de Catriel, que era intensamente buscada por la Policía, fue encontrada sin vida en el río Colorado, cuando los bomberos recorrían su cauce, aguas abajo.
Fuentes judiciales informaron que hay un joven demorado que sería su ex pareja y si bien todavía no se sabe cómo murió la adolescente ya que el cuerpo no estaba en condiciones para realizar la investigación correspondiente, aseguran que la desaparición es un indicio de femicidio. 





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