Las polémicas de Atlético Tucumán – River de las que se hablará mucho tiempo

River se quedó nuevamente en la puerta de un campeonato local y pasará al menos siete años sin consagrarse campeón en el ámbito local, pero que para nada empaña lo que ha conseguido Marcelo Gallardo en este último tiempo. Sin embargo, más allá del sabor amargo, es clara la bronca que puede haber en un partido polémico.Desde el comienzo, se dio una jugada puntual que pudo haber marcado el andar del partido y facilitar la noche para el “Millonario”, cuando Rafael Santos Borré tomó la pelota y definía a la red con Luchetti vencido, pero el asistente levantó la bandera y cobró una posición adelantada que no fue.
Ya con el andar del juego y el 1 a 1 desarrollado, el segundo tiempo fue donde llegaron los mayores desaciertos de Patricio Loustau y todas ellas dentro del área. La primera fue la más clara de todas y fue una falta de Leonardo Heredia sobre Nacho Fernández, en donde el jugador local se lleva por delante al volante y este cae en el área.
A los pocos minutos, un nuevo desborde de Matías Suárez por la izquierda obligó a Guillermo Ortiz a frenarlo y lo tomó de la camiseta para evitar que siga su andar sobre la raya final, en cercanías de Luchetti. Pese a que fue clara la imagen, el encargado de impartir justicia lo omitió.
Ya en el final, River protestó por una jugada de Ignacio Scocco, que cayó mano a mano con el arquero, pero se vio claramente que el ex Newell’s se tropezó antes de rematar, pero ya los ambientes estaban alterados. Quitando esta última, esas tres jugadas darán vuelta en la memoria de todos, pero nada le quitará el mérito a Boca, que se termina consagrando de manera agónica.

Source link