Salud para mascotas: altos costos en atención de especialidades y exámenes médicos ponen en riesgo el cumplimento de Ley de Tenencia Responsable



Con el paso de los años las mascotas han dejado de ser solo eso, se han convertido en un integrante de la familia y hasta en un hijo para muchos. Esto ha hecho que la atención médica relacionada a ellos vaya en aumento, existiendo mayores opciones y tratamientos para mejorar su calidad de vida.
“Al momento que la mascota comienza a ser considerado un miembro más de la familia, las personas quieren aportar mayores beneficios y protección en salud. Eso significa que yo ya no quiero que le amputen una extremidad porque se la fracturó, yo necesito que alguien la repare. Si se repara en los humanos porque no se podrá en animales”, comentó Nicolas Pérez, tesorero nacional del Colegio Médico Veterinario y presidente del Consejo Regional de Colmevet Aysén.
Agua y alimento es lo que se pensaba era necesario para cuidar a una mascota. Hoy hay múltiples costos asociados, dentro de los que se encuentra las vacunas anuales, tratamientos dentales, desparasitaciones, exámenes de sangre y, en caso de enfermedad, tratamientos médicos y controles constantes con especialistas.
Para Pérez, el alto valor de los tratamientos médicos y de las consultas con especialistas se debe a la preparación del veterinario y los insumos utilizados en la atención del animal. “Ahora el veterinario tiene que estar preparado para las nuevas exigencias, tiene que ser un especialista y a la vez debe invertir en capacitación constante y equipamiento médico para poder hacer los diagnósticos adecuados y los tratamientos correspondientes”, aseguró.
Pese a ello Perez señaló que no existen especialidades en medicina veterinaria en Chile, catalogando así a quienes deciden enfocar su carrera a un área en específico. “La especialidad médico veterinaria no está todavía regulada, a diferencia de la medicina humana. Existen muchos colegas que nosotros llamamos especialistas, pero habría que poner especialistas entre comillas porque no existe a nivel nacional algo que diga que esta persona es especialista en algo”.
Cada año una persona debe como mínimo vacunar una vez a su mascota y realizarle un chequeo general, gastando alrededor de $95.000. Si en este proceso tu perro o gato presenta algún problema u enfermedad, deberá recurrir a una consulta con especialista.
Visitar a un cardiólogo o oftalmólogo puede llegar a costar $60.000, dependiendo de la clínica veterinaria. Esto se asemeja al valor de la atención particular en la salud humana. Y claro, actualmente son tantos los problemas que existen en los sistemas de salud humanos, que el tesorero de Colmevet indicó que es bastante soñador pensar en que existirá alguna inversión del Estado o que se podrán acceder a estos tratamiento a menor costo, precisando que el valor también se debe a que muchos “especialistas” al dejar de realizar otro tipo de atenciones, como vacunas o consultas generales, reciben menos visitas y por ende menor ganancias.
Opciones disponibles para costear tratamientos y servicios
Pese a no existir actualmente ninguna contribución ni programas del Estado para la salud de los animales, se han creado diversos servicios privados que buscan ayudar a disminuir los costos asociados a sus cuidados.
Isapet es una de las opciones disponibles, la cual ofrece seis planes de salud de diversos costos y coberturas. El precio va desde los 6.500 a 18.000 mensuales, accediendo a diversos porcentajes de arancel.
“Surgió por la necesidad nuestra. Nosotros mismos nos dimos cuenta, porque tenemos mascotas, que uno destina la mayor parte de su presupuesto a la alimentación y la salud, y que no había nadie que pudiera ayudar”, comentó Alvaro Baeza, subgerente general de Isapet.
Dependiendo del tipo de prestación, consulta general, especialistas, exámenes, las personas podrán solicitar un reembolso por el gasto efectuado, existiendo topes anuales asociados a los tratamientos y servicios cubiertos. En un plazo de 3 a 4 días se realizará la devolución del dinero.
“Esto viene a reforzar la tenencia responsable. Como el dueño tiene un sistema que le permite cubrir algún tipo de enfermedad en el desarrollo de su vida, su mascota también pueda tener un sistema similar”, señaló Baeza.
Planes con costo anual es lo que ofrece Petsalud. Desde los $59.990 las personas podrán acceder a diversos servicios y prestaciones, dentro de las que se encuentran consultas gratis, vacunas gratis, desparasitaciones y descuentos en radiografías y fármacos.
Seguros Falabella ofrece dos planes, uno básico de $6.600 mensuales y un full de $14.950. Dentro de estos se incluye el reembolso por gastos veterinarios por enfermedad y por accidentes. Además, considera el costo por responsabilidad civil en caso de que tu mascota muerda a un tercero.
Ofreciendo coberturas similares, Seguros B y T permite asegurar mascotas por $115.000 anual. Para contratar el servicio, el animal debe tener al menos 6 meses y ser menor a 10 años. Sumado a ello la mascota debe habitar en el domicilio de quien contrata y no contar con ningún defecto físico o enfermedad.
Salud pública para mascotas
En mayo de este año, el Salvador inauguró el primer hospital público veterinario. Este tiene como principal objetivo atender de forma gratuita a los animales domésticos de la población más pobre del país, la cual no cuenta con los recursos para costear la atención y servicios veterinarios privados.
A nivel nacional existen diversos municipios que realizan jornadas de castración y vacunación gratuitas. Providencia y Ñuñoa a través de sus redes sociales da a conocer a la comunidad el día de la convocatoria. Algo similar es lo que ofrece la Municipalidad de Santiago, quienes disponen de una Posta Veterinaria, en donde vacunan y entregan algunos servicios veterinarios gratuitos.
Cuando una persona decide adoptar o hacerse responsable de una mascota debe considerar que en algún momento deberá costear algún problema de salud o acudir a un veterinario especialista. Este gasto será adicional al que comúnmente se hace por concepto de alimento, vacunas y control general. Por eso no hay que olvidar realizar los controles anuales y estar al tanto de los cambios de comportamiento de nuestros animales, ya que al prevenir enfermedades se pueden evitar gastar grandes sumas de dinero en tratamientos y exámenes.



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