Arrebata Covid-19 la alegría de la Navidad a los mexicanos




Ciudad de México.-En la casa de Reyna Pozos, dos espacios en la cena de Navidad estarán vacíos: son los de su hijo y esposo quienes murieron este año el mismo día.Su hijo de 40 años falleció el 2 de junio tras ser diagnosticado con Covid-19 y su esposo de 71 años horas después por un infarto tras enterarse de lo sucedido; es un doble duelo el que Reyna está viviendo.
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Compartió que su hijo tenía temperatura y tos, entró a la clínica y ya no salió; sólo les avisaron que ya había muerto.

No lo pude volver a ver, ya nunca”.

Al regresar de hacer los trámites por el fallecimiento de su hijo, su esposo ya había muerto por un infarto.Sin mucho ánimo acudió ayer al mercado La Merced para comprar el bacalao y otros insumos para la cena que se reducirá a la compañía de su hija y nietos; esta vez tampoco habrá pavo.”Para mí va a ser muy triste porque ya no estarán”, expresó.Guillermo Carlos Pozos, su hermano, la acompañó a hacer las compras aunque cenarán separados por la pandemia.
Es la Navidad más pesada, la más gacha de los 63 años de toda mi vida”, expresó el hermano de Reyna.

La afluencia ayer al Mercado La Merced fue baja en comparación con otros años, aunque los comerciantes esperan que se reponga la próxima semana debido a que, aseguran, los clientes dejan todo a lo último.

Mercado La Merced en la Ciudad de México. Agencia Reforma

Doña Socorro Sánchez, otra cliente del mercado, dijo que en su casa se congregaba regularmente toda la familia, pero ahora no habrá posibilidad.”El ambiente por la pandemia se siente apagado, aunque le quieran echar ganas en sus casas ahorita solo tortas, porque pierna o más cosas sofisticadas no hay, no se ve el mismo entusiasmo”, expresó.
“Yo como el ermitaño ni invitados, encerradita y temprano a la cama, estaremos unas tres personas y ya”.

Aunque no pierde del todo la tradición pues fue al mercado a comprar su bacalao, sus romeritos, también cocinará un rollo de carne relleno, pasta, gelatina, pastel y café.

En la cena de Navidad, María de los Ángeles Ceguera Mejía se reunía con alrededor de 30 personas, entre hijos, yernos, nueras, nietos y bisnietos, contó, pero ahora solo serán seis.”Solitos nos la vamos a pasar ahorita, (con) mis dos hijas de tantos (familiares) que nos juntábamos, pero sí vamos a celebrar, claro que sí”, aseguró.Debido a la pandemia, el Gobierno de la Ciudad de México realiza una campaña para llamar a la población a no hacer fiestas o reuniones con amigos o familiares, ni posadas durante estas fechas a fin de evitar el contagio.Recomendó solo cenar con las personas que viven en la misma casa y evitar a personas ajenas a la misma para disminuir el riesgo de contagio.



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