Un 13 de enero nacía en Parque Patricios Juan Castro junto a su hermano gemelo Mariano. De profesión periodista su talento, su irreverencia su trasgresión, su forma directa de hablar sin vueltas hizo que fuera uno de los comunicadores jóvenes más admirados y con más llegada a la gente.
Sin embargo ese enorme futuro que se avistaba en su camino tuvo un final abrupto, shockeante y al día de hoy poco claro. Juan falleció un 5 de marzo del 2004 al caer de un primer piso de su departamento de Palermo. Tenía 33 años.
Pero en esta nota queremos celebrar al periodista, al chico lindo que robó los corazones de los hombres más codiciados,por ejemplo a Ricky Martin, con quién mantuvo un romance secreto y al que le habría roto el corazón y al que sus compañeros de trabajo recuerdan con amor.
Juan comenzó su carrera en el medio allá por 1987 como asistente de producción del programa radial Feedback, de Mario Pergolini y Ari Paluch en Rock & Pop. Al año siguiente, con sólo 17 años, Castro trabajó en Malas compañías, otro exitoso ciclo de radio, al tiempo que también incursionó como modelo publicitario junto a su amiga Karin Cohen.
En 1991 llegaría una de sus primeras oportunidades televisivas en un ciclo llamado Crema americana, que compartía junto a Ari Paluch y Pato Galván por América TV. A los pocos años su carisma ya hacía la diferencia y fue convocado por Telefé Noticias, donde se destacó haciendo coberturas sobre temas de actualidad.
Luego llegaría Zoo, las fieras están sueltas, por América. Sin dudas, este programa fue para la época un ciclo vanguardista que trataba temas de los que en ese entonces nadie hablaba como las drogas y la sexualidad. Mientras tanto seguía en radio junto a Verónica Lozano con “El Mañanero”. Hasta que un 7 de marzo de 2002 llegaría el programa con el que se consagraría y que tristemente sería su último trabajo. Kaos en la ciudad, con producción de Endemol. Se emitía por Canal 13 los jueves a las 23 y logró superar requerimientos muy estrictos impuestos por la emisora. Para perdurar en su programación, el ciclo debía registrar elevados niveles de audiencia. Así, las primeras cuatro emisiones fueron realizadas en forma gratuita por Castro y sus colaboradores: Martin Ciccioli, Carla Czudnowsky, Ronnie Arias y Martín Jáuregui.
El programa superó las expectativas y se mantuvo a lo largo de los dos años que estuvo al aire en 23 puntos de rating promedio, compitiendo con Videomatch en Telefe. Sin embargo y a pesar de su gran momento profesional, Castro batallaba puertas adentro con su adicción a las drogas.Pero luego de una internación que los medios titulaban como un pico de El 7 de agosto, se paró frente a las cámaras de Kaos en la Ciudad, y habló con sinceridad de sus problemas con las drogas: “Evidentemente mi apasionamiento por mi trabajo no es el único problema que tengo. Estuve dando un par de vueltas por el infierno y pensaba que podía salir de ahí cuando quería. Sin embargo, muchas veces me descubrí a mí mismo envuelto nuevamente en llamas. Ahora estoy de vuelta, de pie, y con ayuda de mis amigos y seres queridos podré seguir haciendo el programa hasta fin de año. Espero recuperarme, es un bueno momento para reordenar algunas cosas en mi vida porque soy de los que piensan que no hay casualidades”, decía el propio Castro en su programa.A partir de entonces, comenzó un tratamiento ambulatorio de su adicción que, a la fecha, se encuentra bajo investigación de la Justicia argentina. Pero en Kaos, Juan ya hablaba de aborto legal, de etiquetas, de sexualidad, de estigmatización, de igualdad, de lo que nadie quería hablar. Y así lo queremos recordar.
