Este lunes comenzó la inmunización de 5.600 integrantes del Servicio Penitenciario Federal, considerado un sector de riesgo por estar en contacto directo con los presos en las unidades del Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA).La medida fue tomada por los ministros Martín Soria (Justicia y Derechos Humanos) y Carla Vizzotti (Salud). La vacunación contra el covid-19 se llevará a cabo en el Complejo Penitenciario I de Ezeiza, que incluye el Complejo IV de Mujeres y las unidades 19 y 31; el Complejo Penitenciario II de Marcos Paz, donde también se vacuna al personal del Complejo Penitenciario de Jóvenes Adultos y la Unidad 34; y en el Complejo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, conocido como Devoto, que incluye a las unidades 18, 21 y 28, según informaron desde la cartera de Justicia.Asimismo, añadieron que una vez completada la inmunización del personal penitenciario de las unidades ubicadas en la región AMBA, se prevé vacunar a más de 2.900 agentes penitenciarios que prestan servicio en contacto estrecho con la población carcelaria de las unidades del SPF del interior del país.La decisión busca proteger a los trabajadores de esta área y minimizar el riesgo de un eventual brote en las unidades penitenciarias.Asimismo, Soria y Vizzotti analizaron la situación sanitaria del sistema penitenciario, además de repasar la situación de los 12 Hospitales Modulares de Emergencia y los 31 Centros de Aislamiento Sanitario (hospitales carcelarios) en las unidades penitenciarias federales y bonaerenses.
Como política para afrontar la pandemia de Covid-19, el Gobierno nacional “decidió resolver una problemática pendiente que obligaba a los penales federales a recurrir a los hospitales municipales para la atención de las personas privadas de su libertad”, se recordó en un comunicado. En este sentido, ambas carteras articularán en el entrenamiento del personal sanitario de estos hospitales modulares bajo un nuevo paradigma con perspectiva de género, consultorías y enfoque preventivo.Al tiempo que se acordó fortalecer el programa de Salud en Contexto de Encierro para ampliar la capacitación de las personas privadas de su libertad como promotoras de salud, y así poder llevar conciencia hacia el interior de los penales federales una política sanitaria basada en la prevención y acceso temprano al diagnóstico y tratamiento.
