Diego Pablo Simeone es sinónimo de sacrificio, de lucha y de fútbol. Vive fútbol y respira fútbol, y es por eso por lo que se convirtió en la figura mundial que es hoy, una vez que colgó los botines, y que lo llevó a ser uno de los máximos ídolos de Atlético de Madrid, donde también brilló como jugador.El “Cholo” nació en Buenos Aires, el 28 de abril de 1970 y su camino comenzó en las entrañas de Vélez Sársfield, club en el que debutó en el año 1987 y en donde ya mostraba la personalidad que lo iba a caracterizar en toda su carrera, que tuvo una extensa trayectoria en el fútbol de Europa.
Pisa fue su primer equipo en el Viejo Continente, en donde estuvo dos temporadas y en la que se empezó a convertir en una fija para la Selección Argentina, lugar que no iba a dejar hasta despúes del Mundial de Corea y Japón 2002, tras una trayectoria que incluyó dos Copa América, la plata olímpica y 106 partidos en los que anotó 11 goles.En Europa, a nivel clubes, su pasó grande fue a Sevilla en 1992 y por pedido explícito de Carlos Salvador Bilardo, que se sintió identificado por la firmeza y garra en el juego, pero también en su mandato y viveza criolla en el campo de juego, pero tras dos temporadas iba a partir rumbo a Madrid para sumarse al Atlético.En el “Colchonero” empezó a dar sus primeros frutos y también las consagraciones a nivel clubes. Simeone formó parte del legendario equipo de 1996 que se iba a quedar con La Liga y la Copa del Rey, bajo el mando de Antic, en un hazaña que iba a repetir en el 2014, pero como DT.
Simeone festeja y Ronaldo mira, los roles invertidos.
Inter de Milán puso los ojos en él y se lo llevó para un equipo de super estrellas que se iba a coronar de la Copa de la UEFA en 1998 con Ronaldo, Zambrano, Zanetti, Pagliuca y Djorkaeff, entre otros. Sin embargo, dos años despúes se mudaba a Roma, donde Lazio lo iba a esperar para un triplete espectacular.En el año 2000, conquistaba su segundo título de liga con la Serie A, a la que había que sumarle la Copa Italia y la Supercopa de Italia, pero además la Recopa de la UEFA. Aquel conjunto de la capital tenía a Nesta, Stankovic, Nevdev, Mancini, Inzaghi y Salas, además de los argentinos Juan Sebastián Verón y Matías Almeyda.
Simeone junto a Verón y Salas
Finalizado su paso por Italia, volvió a España para vestir nuevamente los colores del Atlético por dos temporadas y regresó a la Argentina pera despedirse como profesional en Racing Club, equipo del que se manifestó hincha en más de una oportunidad y en donde también empezaría su carrera como entrenador.En 2006 se puso al frente de la “Academia” por algunos partidos, pero luego su despegue iba a estar con Estudiantes, con el que se consagraría campeón del Apertura 2006. De ahí, pasó a River en donde volvió a alzar un título local, pero quedaría marcado por haber sido último al torneo siguiente.
Nominado al mejor entrenador del año en el 2014.
San Lorenzo fue el paso siguiente en donde empezó a llamar la atención por su estilo de juego y las formas, que lo catapultaron a Catania. En Italia y con una legión de argentinos haría un breve paso y regresaría a Racing en 2011, donde sería subcampeón.Previo al inicio de su nueva temporada en la “Academia”, Atlético de Madrid lo llamó de urgencia para que busque evitar el descenso de un club completamente en crisis y el resto es historia. En su segundo año, llevaría al equipo a copas europeas y lo consagraría en la Europa League de 2012.
Simeone le cambió la cara y torció la historia de Atlético de Madrid.
A ese título le siguió la Supercopa de Europa ante Chelsea, la Copa del Rey (2013) y la consagración en La Liga de España y Supercopa de España (2014). Sin embargo, estaría marcado por la historia oscura en la Champions League. Tras haber alcanzado las finales de 2014 y 2016, terminaría perdiendo ambos encuentros ante Real Madrid en tiempo de adición, primero, y en los penales después.Su lucha generó la reconstrucción y fortaleza económica del club y luego de cuatro años volvió a alzar un tíutlo internacional, con otra victoria en la Europa League y la posterior revancha con Real Madrid en la Supercopa de Europa. Hoy, el Atlético se mete en la lucha mano a mano con los merengues y Barcelona, y Simeone se convirtió en uno de los mejores DT del mundo.El tiempo dirá cuando será su turno en la Selección Argentina, en donde se sabe que, por su paso y cariño, volverá a tenerlo entre sus filas y sobre el que se espera mucho. Sin embargo, los objetivos tras una década siguen vigentes en Madrid donde es una absoluta leyenda.
