La Secretaría de Educación Pública (SEP) aseguró que la prueba internacional PISA para estudiantes de secundaria sí se aplicará, pero en 2022, debido a los retrasos que generó la pandemia de COVID-19 en esta evaluación.
Esto, luego de que un funcionario del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA), por sus siglas en inglés, aseguró que la prueba estaba suspendida en México.
En una gira de trabajo, la titular de la SEP, Delfina Gómez Álvarez, aseguró que este mismo año habrá una fase piloto, previo a la aplicación de la evaluación en 2022.
PISA es un examen para estudiantes de 15 años que se aplica cada tres años para medir habilidades en lectura, matemáticas y ciencia y en el que México participa desde el año 2000. También está afiliado a la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico, de la que México es miembro.
De acuerdo con la SEP, originalmente se tenía programada la prueba para este año, “con su respectiva fase piloto a desarrollarse en 2020, pero por la emergencia sanitaria sería adecuado aplicar la fase piloto en otro periodo del año”, explicó.
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Informamos que la prueba del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA) no será suspendida y que para el próximo año está programada la aplicación internacional.https://t.co/x0O62pdA8N
— SEP México (@SEP_mx) May 3, 2021
Delfina Gómez sostuvo que para aplicar la prueba PISA los estudiantes deben estar en las escuelas, por lo que “ya se analizan los mecanismos que permitan su realización”.
También informó que además de la prueba PISA, se realizarán “evaluaciones diagnósticas” para conocer el estado de los estudiantes.
Aplicar prueba PISA era “riesgoso”: Mejoredu
La Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu) reiteró que la prueba no fue suspendida, y explicó que sin un retorno presencial seguro a las escuelas, los protocolos de aplicación de la prueba PISA no son viables ni
pertinentes, pues implican un riesgo sanitario y generar “sesgos importantes que podrían restarle validez y confiabilidad” a la evaluación.
También detalló que el grupo de alumnos que participan en esta prueba –15 años de edad, en tercero de secundaria y primero de educación media superior– son el segmento de población “para el que las condiciones de educación a distancia han sido las más difíciles, razón por la cual considera que desarrollar una evaluación externa de cualquier tipo para estos estudiantes resulta inapropiado y conlleva el riesgo de aumentar la presión que para ellos ha significado enfrentar la contingencia sanitaria y continuar con sus actividades escolares”.
Afirmó que tanto la fase piloto, como la prueba PISA de 2022 serán coordinadas por las autoridades educativas y sanitarias, pues deberán considerar los recursos físicos, humanos y materiales para la prueba.
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