Sinaloa.- En medio de la crisis, los dueños del establecimiento de jugos y desayunos “del Valle” en Culiacán, Sinaloa, quienes laboran desde el año 1977 decidieron colaborar al beneficio de los más necesitados e implementaron una nueva modalidad para poner alimento al alcance de quien no cuente con los recursos.Clarissa Padilla, trabajadora e hija del dueño del comercio, creció viendo a su padre Francisco Padilla sacar adelante su negocio de desayunos y jugos recién hechos en el centro histórico de la ciudad.
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Al dar inicio la pandemia de Covid-19 decidieron aportar su granito de arena, ya que, la economía de los culiacanenses se vio muy afectada y quienes menos tenían ahora pasaban por hambre.Leer más: Dignificar su trabajo, piden vendedores ambulantes del centro de Culiacán
Sabíamos que ahí afuera había personas que no tenían la manera de comprar su propio alimento y trabajamos para poder ayudarlos” señaló.
Decidieron implementar la modalidad de desayunos gratis para los más necesitados y le denominaron “lunch pendiente”, consiste en invitar a todo aquel que tenga la posibilidad a pagar una comida para que ellos puedan entregársela a quien la solicite sin ningún costo, sólo son 23 pesos los que se debe aportar para hacer feliz a una persona.El alimento que ellos entregan a cambio de dicho monto es un sándwich con queso, jamón y verdura, además de una bebida de 600 mililitros.Desde el inicio buscaron participación por parte de sus clientes y otras personas que suelen caminar por la zona, con temor de como pudieran reaccionar las personas, la estrategia fue un éxito, en ocasiones no pagan sólo un desayuno, sino que, hay quien paga hasta 3, después, las personas pueden acudir a pedirlo de manera gratuita.Leer más: La Universidad Autónoma de Sinaloa tendrá nueva Ciudad UniversitariaEn promedio son 3 desayunos los que se pagan al día y cuando cantidad de solicitantes es mayor, le brindan los alimentos y reponen la cantidad cuando alguien paga nuevamente, sin importar que sea otro día y de igual manera si hay desayunos pagados y nadie los solicita, se guarda el monto para otra ocasión ya que, los desayunos se hacen en el momento.No siempre son los mismos clientes los que pagan ni los que solicitan, los visitantes suelen variar. En el caso de aquellos que necesitan del alimento gratuito, hay quienes los abordan con pena, pero ellos siempre buscan la manera de hacerlos sentir cómodos.Llaman a todo aquel que le sea posible a acudir al establecimiento a apoyarlos y sumarse a esta noble labor porque siempre hay gente que lo necesita.
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