El caso Sinaloa frente al retorno a clases presenciales



Como en ningún otro estado de la República, en Sinaloa ha sido plenamente entendida la palabra “voluntario” que el presidente Andrés Manuel López Obrador dispuso en relación con el regreso a clases. Clave, en medio de esta polémica, resulta el hecho de que el secretario de Educación del Gobierno de Quirino Ordaz Coppel sea un experto en la materia, Juan Alfonso Mejía López, quien ha dedicado su vida al tema, lo mismo desde el activismo ciudadano y como maestro, que como funcionario federal y estatal. Ante el nivel de riesgo que para muchos padres de familia y docentes implica el retorno al sistema presencial, mientras otros sostienen que el confinamiento es dañino a la salud mental de la niñez, Mejía López ha mostrado sapiencia en su diálogo público con la ciudadanía, lo cual aporta en términos de tranquilidad y certidumbre en medio del caos de la pandemia.“Sin prisa pero sin pausa” es su frase de batalla para explicar el retorno gradual a las aulas, de acuerdo con la disposición de cada escuela y de cada padre y/o madre de familia. Ha sido eficaz su exposición en torno a las bondades del modelo híbrido a elegir: presencial o en línea.Hasta ayer, el presencial estaba listo para ser aplicado en 1,363 planteles de los 5,100 que existen en el sistema de educación pública en Sinaloa. De ellos, al cerrar esta columna, solo 847 habían confirmado su integración a partir del próximo lunes. El aforo será de 50 a 75 por ciento.Con paciencia, Juan Alfonso dedica todo su tiempo a explicar cada duda de los padres y tutores, a quienes sugiere que, si tienen miedo, es preferible que permanezcan bajo el sistema en línea.Queda claro que la decisión respecto a cada niño o niña está en casa. Ahora el tema son los maestros y maestras en relación con sus líderes sindicales. El del SNTE 53, Fernando Sandoval, ya resolvió que ninguno de sus 17 mil agremiados se presentará en las mil escuelas del nivel estatal. La mayoría son del sistema federal, cuyos maestros representa el SNTE 27 y que enfrentan un difícil reto: dar clases presenciales y en línea, una doble jornada que resulta casi imposible, pero su dirigente no les ha sabido resolver.LUZ PROPIA. El solo hecho de ser incluida en la cuarteta inicial de aspirantes a la próxima presidencia de la Mesa Directiva del Senado de la República, habla bien del desempeño legislativo de la sinaloense Imelda Castro Castro. Sobresale entre los 128 integrantes de la Cámara Alta y no en balde ocupa la actual vicepresidencia. Ayer, junto con las otras tres aspirantes, Imelda declinó en favor de Olga Sánchez Cordero como única propuesta de Morena para la presidencia del Senado, tras la reincorporación a su escaño de la hoy exsecretaria de Gobernación.VIENEN CON TODO. Esta casa editorial no se equivocó en la selección de talentos de última generación “Nuevas voces e ideas en DEBATE”. Entre las y los 44 integrantes de esta camada de jóvenes columnistas en nuestras plataformas, tan solo esta semana dos de ellos alcanzaron logros notables: Alfredo Brambila recibió mención honorífica entre un centenar de participantes en importante certamen nacional de ensayo, mientras que Enrique Quiñónez fue nombrado profesor titular de Lectura y Redacción Jurídica en su alma máter, la Escuela Libre de Derecho de Sinaloa, una de las más prestigiadas del país. A Brambila (de Costa Rica, Culiacán) puede leerlo hoy y todos los viernes en EL DEBATE con su columna “Para pensar” y a Quiñónez (de Guasave) los sábados con “De puño y letra”. ¡Muy recomendables! Felicidades a ambos compañeros de páginas.



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