El ascenso argentino suma un nuevo papelón de la mano de la Asociación del Fútbol Argentino y en este caso las reuniones que se llevarpn, con el cónclave final en Ezeiza dejaron más problemas que soluciones cuando se definió que la final entre Tigre y Barracas Central se mudara de Arsenal a Banfield.Ahora, a poco más de 72 horas de la primera definición por un pase a la Primera División se presentaron comunicados cruados de ambos clubes donde el juego de poder se hace presente en donde el “Matador” se quiere imponer ante la influencia de Claudio Tapia, presidente de AFA, y la interna política que siempre esconde.
��️ COMUNICADO OFICIALDebido a que no están dadas las condiciones para que todos nuestros soci@s e hinchas puedan disfrutar de una final como se merecen, desde el Club Atlético Tigre estamos trabajando para que la mayor cantidad del pueblo Tigrense pueda asistir al partido. pic.twitter.com/U4dqyKAOTM — Club Atlético Tigre (@catigreoficial)
November 19, 2021
En este caso, desde Tigre publicaron un texto en donde afirman que “no están dadas las condiciones para que todos nuestros socios e hinchas puedan disfrutar de una final” y por eso continúan trabajando para cambiar la sede. Esto tiene que ver en que se habrían confirmado 6.800 entradas para cada uno y piden más de 12.000.Por eso, aseumen que la mejor idea es mudarse a la cancha de Lanús o la de Independiente como alternativa, mientras también se piensa en San Nicolás como una restante variante. Del otro lado, Barracas responde con su comunicado en donde se respalda que el Florencio Sola, cancha de Banfield, y las condiciones fueron firmadas y aparecen en el Boletín oficial.
Primero hablan de “la disponibilidad de lugares equivalentes a cada club”, en donde sacan ventaja ante la gran diferencia de simpatizantes entre un club y otro, y remarcan que el club “se está haciendo valer y no se siente menos que nadie”. “En Barracas no hay lugar para las especulaciones o las presiones ajenas que puedan influenciar en la igualdad deportiva”.Mientras tanto, los clubes esperan poder dar el visto bueno para la venta de entradas, pero todo vuelve a ser turbulento en una categoría en la que el “Guapo” quedó ante los ojos de todos por algunos fallos arbitrales irrisorios, la no suspensión del arquero Gagliardo en la última fecha y la denuncia de jugadores de Villa Dálmine a sus compñaeros por ir para atrás en la derrota por 3 a 1 ante el finalista.
