En medio de sanciones y presiones de Estados Unidos y la Unión Europea (UE) pero con el apoyo de China y Rusia, el presidente de la república de Nicaragua, Daniel Ortega, asumirá en el día de hoy su cuarto mandato consecutivo junto con su esposa Rosario Murillo como vicepresidenta.De 76 años, Ortega prestará juramento ante el Parlamento, de mayoría oficialista, en una ceremonia en la plaza de la Revolución que será transmitida en cadena nacional de televisión y sobre la que no se han anunciado detalles. El mandatario logró un 75,92% de los votos en unas cuestionadas elecciones celebradas el pasado 7 de noviembre.
Es por eso que la investidura del ex combatiente sandinista tendrá como telón de fondo las sanciones aplicadas por Estados Unidos y la UE a familiares, allegados, funcionarios y algunas entidades como la Policía y la Fiscalía.Con penalidades por delitos de corrupción y violación a los derechos humanos, Washington y Bruselas consideran además que no fueron “democráticas” las elecciones del 7 noviembre, en las que Ortega resultó ganador con la inmensa mayoría de los opositores presos o en el exilio.Ortega calificó estas declaraciones como “agresiones” contra su país y acusó a Estados Unidos y a la UE de “injerencia” e “irrespeto a la soberanía”.A la ceremonia de toma de posesión asistirán varios cancilleres, entre ellos los de Bolivia, México, Palestina y República Árabe Saharaui Democrática.
Además, se confirmó la presencia de comitivas de Rusia, Irán, Corea del Norte, Siria, Cuba, Venezuela, Honduras, Belice, Vietnam, Laos, Camboya, Angola, Turquía, Bielorrusia, Turquía, Egipto, Malasia y Yemen.Más de 40 opositores, periodistas y críticos del Gobierno fueron detenidos entre junio y diciembre de 2021, incluidos siete potenciales rivales de Ortega en las elecciones de noviembre.A este grupo se suman otras 120 personas que están encarceladas por participar en las protestas del 2018, cuya represión dejó 355 muertos y más de 100.000 exiliados, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).El Gobierno considera que los detenidos son “criminales” que se organizaron para un golpe de Estado con ayuda de Estados Unidos.
