El 17 de febrero de 1963 nació uno de los grandes deportistas de la historia: Michael Jordan, héroe de la NBA y dueño de un talento inigualable. Nació con una hemorragia nasal que casi le cuesta la vida. Y al poco tiempo volvió a estar cerca de la muerte.A los 18 años recibió una beca para jugar en la Universidad de Carolina del Norte. Mientras jugaba, claro, tenía que estudiar. Eligió la geografía. Cuando se fue a jugar de manera profesional a los Chicago Bulls parecía que su carrera quedaba trunca, pero no fue así. Volvió al estudio en 1986, cuando ya era una estrella de la NBA, y se recibió de Licenciado en Geografía.Debutó en la NBA a los 21 años. En su primera temporada, la correspondiente a 1984 y 1985, promedió más de 28 puntos por partido para los Chicago Bulls. Jordan no solo es considerado el mejor jugador de básquet de todos los tiempos por su talento. También por sus estadísticas, porque es dueño de varios récords. Fue el mejor jugador en las seis finales que disputó con Chicago, una marca que sigue sin superarse. El jugador en actividad que más cerca está de esa marca es . LeBron James, con cuatro. Fue diez veces el máximo anotador de una temporada de NBA, siete de ellas de manera consecutiva entre 1987 y 1993. Es el jugador con mejor promedio de puntos de toda la historia de la NBA: su marca es de 30,12 puntos de promedio por partido.En 1996 participó de la película “Space Jam”, en la que personas reales interactuaban con dibujos animados. Las jornadas de trabajo para la película duraban hasta doce horas, de lunes a sábado. Cuando terminaba, Jordan se quedaba jugando en la cancha que le habían armado, y habitualmente invitaba a otros jugadores de la NBA. Michael Jordan jugó uno de los partidos más importantes de su vida con 39 grados de fiebre. Se lo conoció como “The Flu Game”, el juego de la fiebre. Fuera del campo apenas podía estar de pie, pero dentro de la cancha fue un león. Marcó 38 puntos, le dio el triunfo a su equipo y entró, así, una vez más, en la historia grande del deporte.
