Barcelona recayó en la Europa League producto de una mala campaña en la Champions League en el final del 2021 y un inicio de temporada en donde se dio el volantazo con la llegada de Xavi. Desde entonces, el panorama cambió con el apoyo de la gente, la tranquilidad de algunas incorporaciones importantes y un funcionamiento que poco a poco convence.Había tenido una tarde gris en el Camp Nou ante Galatasaray en la ida de los octavos de final del segundo torneo de importancia en el continente y debía mostrar carácter en su viaje a Estambul, donde el local iba a poner el calor de su gente y buscar dar una de las sorpresas.
A pesar de los intentos, Barcelona sacó a relucir la chapa luego de una primera mitad en la que se vio por debajo del marcador. A los 29 minutos de partido, Marcao ganaba en alturas y ponía el 1 a 0 que le daba el pasaje a los locales, tras el 0 a 0 en la ida. Sin embargo, antes del cierre, llegaría la reacción.En una buena conexión colectiva, Ferrán Torres habilitó a Pedri en el área y, tras desparramar a sus rivales, marcó el 1 a 1 que lo ponía de vuelta en carrera. Con esa impronta también inició el segundo tiempo y le iba a dar resultado a los cuatro minutos cuando remató dos veces al arco y no podía con la defensa de Iñaki Peña, pero en la tercera apareció Aubameyang para dar vuelta el marcador.
De ahí en más, Barcelona encontró el dominio de la pelota y sufrió algunas contras forzadas de Galatasaray, que no lograron inquietar a Ter Stegen. Ya sobre el final hubo tiempo para polémica cuando Jordi Alba pateó una pelota hacia los hinchas locales, que no paraban de arrojarle objetos sobre el lateral.De esta manera, el conjunto de Xavi se mete entre los ocho mejores de la Europa League y sigue en carrera por uno de los dos trofeos que no tiene a nivel internacional (Conference League, el otro) y espera a este viernes para conocer a su rival en donde se empiezan a juntar varios nombres históricos.
