Señalando que el objetivo principal es “reducir la elusión de la deuda”, la Ministra de la Mujer y la Equidad de Género, Antonia Orellana, celebró la aprobación de la ley “papitos corazón”, que asegura el pago de pensiones de alimentos a niñas, niños, adolescentes y estudiantes, una nueva garantía para miles de madres que ahora debe ser promulgada y publicada en el Diario Oficial para comenzar a regir.
Concretamente, el proyecto de ley considera dos mecanismos claves para hacer efectivo el cobro de la deuda de pensión En primer lugar, si existe al menos una mensualidad que no se ha pagado, se podrá solicitar al tribunal correspondiente que ordene el pago de la deuda a través de los fondos que el involucrado tenga en sus cuentas bancarias, instrumentos de inversión y en las cuentas de ahorro previsional voluntario. Por otro lado, se dispone que si existen tres pensiones adeudadas continuas o discontinuas y el deudor no mantiene fondos -o estos son insuficientes- en sus cuentas bancarias, instrumentos financieros o de inversión, la parte alimentaria podrá solicitar al tribunal que consulte con la AFP. Además, la legislación también establece límites para el pago de la deuda de alimentos con los fondos de la Cuenta de Capitalización.
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Aprobada la legislación, la ministra Orellana, destacando que la iniciativa nació a partir de los retiros desde los fondos de pensión, y tras explicar algunos aspectos técnicos, en conversación con Meganoticias, señaló que “en caso de que ocurran cosas como perder el trabajo, accidentes, eso siempre se puede acreditar ante el tribunal para poder recalibrar la cuestión del monto”. “Pero aquí lo que estamos buscando es sobre todo reducir el espacio de elusión de la deuda”, sentenció.
La titular del Ministerio de la Mujer y miembro del comité político del Presidente Gabriel Boric destacó que la ley establece, por ejemplo, “la responsabilidad solidaria de las instituciones financieras, es decir, el sector privado también tiene un deber en cumplir en forma y en plazo con estos trámites”. Además, Orellana valoró algunas mejoras a temas que ya estaban en la ley, como por ejemplo, “un reclamo muy común que tiene que ver con que las órdenes de detención para el chiste, que no se cumplen nunca. Eso era porque, cuando se dictaba la orden de arresto para el deudor, no pasa al registro de prófugos”.
La secretaria de Estado también relevó que con la nueva ley se crea un mecanismo de interconexión entre los tribunales de familia y las instituciones financieras de todo tipo, que le reportan a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF). Ahora, “la Corte Suprema nos pidió un plazo para poder ejecutar todos los cambios administrativos e informáticos que hay que hacer para que esto funcione bien, son seis meses desde la vigencia del Registro Nacional de Deudores, que empieza en noviembre, y por tanto en mayo de 2023. ¿Por qué esto? Porque hay que crear los mecanismos de interconexión con los bancos, con las AFP, con Servicio de Impuestos Internos, para que funcione lo que estamos buscando, que es un mecanismo permanente y eficaz”, relató la ministra Orellana.
Cabe mencionar que la “Ley de Responsabilidad Parental y Pago Efectivo de Deudas de Pensiones de Alimentos” se gestó desde abril, por iniciativa de la titular del Ministerio de la Mujer, en medio de las negociaciones para rechazar el quinto retiro.
Antonia Orellana es periodista de la Universidad de Chile. Durante su etapa universitaria trabajó con el Frente de Estudiantes Libertarios, que tenía varias diferencias con la Izquierda Autónoma donde militó Gabriel Boric. Años después ambos se encontraron en Convergencia Social (CS). Ahí Orellana tuvo un rol clave para respaldar al entonces diputado en el Acuerdo por la Paz y la Nueva Constitución del 15 de noviembre de 2019, cuando algunos militantes pedían su expulsión del partido, puesto que institucionalmente no se sumaron al tratado. También participó de las negociaciones, junto al Frente Feminista de CS, para lograr la paridad de género en el proceso constituyente. Tras ello, fue candidata a convencional, pero no fue elegida. Luego, en la campaña presidencial, su vínculo con el Mandatario se profundizó. Y, tras tomar la decisión de que el Ministerio de la Mujer se incorporaría al comité político, el Presidente Boric la invitó a ser parte del gabinete.
