Una de cada cinco personas mayores de edad en México fueron discriminadas durante 2017, principalmente por motivos relacionados con su apariencia física, su arreglo personal, su edad o por profesar una religión distinta a la católica, revela la más reciente Encuesta Nacional sobre Discriminación (Enadis), presentada este lunes.
Si se amplía el rango a los últimos cinco años, hasta 23% de las personas encuestadas señalaron que se les negó sin justificación algún derecho en ese periodo, principalmente acceso a programas sociales, atención médica, servicios de gobierno, créditos de vivienda y la entrada a algún establecimiento comercial privado.
Según los resultados de la encuesta -aplicada en casi 40 mil viviendas del territorio nacional- la zona centro-sur del país es donde se reportan los más altos índices de discriminación: Puebla tiene 28.4% de prevalencia; Colima 25.6%; Guerrero tiene 25%; Oaxaca 24.9% y Morelos 24.4%.
En contraste, los estados con menores reportes de actitudes discriminatorias y prejuicios están en el centro hacia el norte: Nayarit con 13.1% de prevalencia; Zacatecas con 13.7%; Nuevo León con 14%; San Luis Potosí con 14.4% y Durango con 15.4 por ciento.
El principal motivo de discriminación fue la apariencia (56.5%); seguido de la manera de hablar (27.7%); la edad (26.9%); las creencias religiosas (24.8%); el lugar donde vive la persona (21.7%), y hasta 19.7% fueron rechazados en razón de su clase social.
La Enadis ha sido realizada en dos ocasiones anteriores por el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred); en 2005 en colaboración con la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) y en 2010 junto con la Universidad Nacional (UNAM). Esta tercera edición es la primera en la que participa el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), a fin de convertir a la Encuesta en una herramienta de políticas públicas, de acuerdo con sus presentadores.
Los resultados de la Enadis 2017 fueron presentados este lunes por los titulares del Inegi, Conapred, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y la abogada general de la UNAM, Mónica González, quienes coincidieron en que los prejuicios afectan a las personas en una dimensión mucho mayor que el rechazo: limitan derechos y el acceso a prestaciones básicas como salud y vivienda.
La presidenta del Conapred, Alexandra Haas destacó que si bien la discriminación ocurre en todos los ámbitos y es también responsabilidad de la sociedad, es en las instituciones donde se requiere combatirla de manera más urgente, ya que es ahí donde se pueden empezar a cerrar las brechas sociales, raciales, de género y etarias. “Todos discriminamos y todos podemos ser discriminados”, subrayó la funcionaria.
Por su parte, el presidente de la CNDH, Luis Raúl González, destacó que la Enadis 2017 será una herramienta que permita al Estado mexicano atender sus obligaciones internacionales, si se le vincula con la agenda 2030 de los Objetivos del Milenio de Naciones Unidas (ONU).
También advirtió que la discriminación no siempre surge de un evento que llevó a las personas discriminadas a una posición de desventaja, sino del impulso de ciertos grupos por conservar sus privilegios.
