Matías Patanián y el episodio del gas pimienta: “Fue una verguenza mundial”

Uno de los momentos más bochornosos en la historia del fútbol argentino y sudamericano se vuelve a recordar esa noche, cuando desde la tribuna de Boca Juniors un par de hinchas tiraron gas pimienta en la manga inflable que conducía de la cancha al vestuario visitante, afectando a los jugadores de River gravemente.Ese día, se inició una batalla en los escritorios entre los protagonistas del Superclásicos que continuó por mucho tiempo y que tuvo su pico máximo legal en la final de la Copa Libertadores de 2018, donde la misma se tuvo que trasladar a Madrid por razones que hasta el día de hoy siguen siendo discutibles.Sin embargo, volviendo a aquella noche del 14 de mayo de 2015, Matías Patanián habló en la previa del quinto aniversario de lo que terminó en la eliminación de Boca y, con el correr de los meses, la consagración de River Plate en el torneo internacional, luego de 19 años. “Fue una vergüenza para todo el mundo del fútbol lo que sucedió”, aseguró el vicepresidente “millonario”.

“Estábamos preocupados por la salud de los jugadores”, Matías Patanian. Foto: NA

En su momento, fue el hombre que acompañó al presidente D’Onofrio en su recorrida por el campo de juego de la Bombonera y respaldar a sus jugadores. “Estábamos en el palco más alto, el que está cerca de los palcos de prensa, empezamos a ver que algo estaba pasando en la salida de la manga y en el televisor que estaba allí, había gritos, era algo anormal”, relata.”Entonces nos miramos con Rodolfo y empezamos a bajar con gente de seguridad. Primero nos metimos en el vestuario de River y cuando bajamos a lo que es el campo de juego, intentaron frenarnos para que no entremos, pero veníamos con el impulso y la preocupación de lo que podía estar pasando”, sentenció.Recordando lo que fue una imagen insólita y son precedentes en la Copa Libertadores, Patanian recuerda como actuó. “Lo primero que hice fui a ver a Marcelo (Gallardo) y Rodolfo tuvo el cruce con Arruabarrena, nosotros estábamos preocupados por la salud de los jugadores. Luego Rodolfo salió y no fue fácil su llegada al vestuario porque volaba de todo, yo me quedé un rato más hablando con nuestros jugadores y nuestros asistentes”, comentó.

“Fue una situación de mucha confusión porque hasta el delegado de la Conmebol no tenía la menor idea de qué hacer porque era algo absolutamente inusual, era muy difícil ser una autoridad y estar ahí. En la gente de Boca había mucho nerviosismo porque sabían que iban a ser responsables de una situación que se dio en pleno campo de juego”, destacó.Dicho esto último, los siguientes días fueron de batallas legales y viajes a Luque, Paraguay (sede de la Conmebol), donde finalmente se le dio por perdido el partido a Boca Juniors, por lo que River accedió a los cuartos de final. A pesar de las demandas del “xeneize”, la decisión fue ratificada y el futuro de ese torneo ya es historia recordada para los de Núñez.

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