IMSS analizará peticiones de incapacidad para vigilar brotes de COVID

Para la reapertura de las actividades económicas, en lo que se ha llamado la nueva normalidad, el IMSS presentó una estrategia basada en la vigilancia epidemiológica y en minimizar el riesgo de las cadenas de transmisión en las empresas, con lo que pretende evitar brotes de COVID-19.
Para hacer este seguimiento, el Seguro Social se basará en los datos de las incapacidades, “que sirven para reconstruir la historia de las empresas respecto a qué tan buenas son para disminuir las cadenas de contagio”, aseguró Mauricio Hernández Ávila, director de Prestaciones Económicas y Sociales del IMSS.
El funcionario explicó que cuentan con un tablero a nivel nacional para ver, a partir de las incapacidades, el curso de la epidemia relacionada con COVID. Hay además un tablero que permite analizar esto por estado.
Y en un mayor nivel de detalle, el desglose se va hasta la vista de una empresa. “Se pueden ver las variaciones de casos en cada empresa. Esa gráfica sirve para identificar bien a las empresas y saber si sus protocolos para frenar las cadenas de transmisión están funcionando”, señaló Hernández Ávila.
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Pero, ¿cómo se sabe que los empleados se contagian en la empresa a partir de los datos de incapacidades? El funcionario explicó que si no hubiera una cadena de contagios en un centro de trabajo se registrarían uno o dos casos de incapacidad por una cierta enfermedad, en cambio si se observan picos con incremento de casos que coinciden en el tiempo y están fuera de la frecuenta esperada, eso revela un brote.
Cuando esto se observe se le pedirá a la STPS que visite a la empresa para verificar protocolos, y lo mismo puede hacer el IMSS.
En el mapa de incapacidades respiratorias 2020, por ejemplo, señaló Hernández Ávila, se ve en Tabasco, en Nayarit y Baja California Sur un exceso de incapacidades temporales en el sector de la construcción, con 10 mil casos de enfermedades respiratorias y 2 mil 496 de COVID de enero a la primera semana de mayo.
“En una empresa vimos que 40 personas  fueron a buscar una incapacidad temporal para el trabajo, eso ya refleja que algo no se está haciendo bien ahí. Así se irá haciendo la vigilancia epidemiológica, con este visor hacia las empresas”.
Respecto a las medidas de seguridad e higiene, lo que se están proponiendo son medidas basadas en ingeniería física, controles administrativos, protección personal, sanitización y capacitación.
Las empresas que no puedan mantener a sus trabajadores a metro y medio de distancia deberán tomar otras medidas como instalar acrílicos, para poner una barrera física que impida la propagación de enfermedades.
Deberán tener además controles administrativas, como filtros en la entrada del centro de trabajo para evaluar el estado físico de los trabajadores, con toma de temperatura. A esto se debe añadir una política para canalizar al trabajador a la atención médica adecuada y que no sea un transmisor de enfermedad.
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Además se deberán implementar medidas de teletrabajo, horarios escalonados para locker y comedor y se tendrán que fraccionar los turnos.
Lo tercero a implementar es el uso de equipo de protección, con mascarillas, caretas, guantes.
Para las medidas de sanitización, las empresas deberán tener alcohol gel disponible, limpieza frecuente y tapetes sanitizadores si así se requiere.
Como todo esto implica justo una nueva normalidad, dijo Hernández Ávila, es necesario dar capacitación a los empleados para que se adhieran más fácil a las medidas.
Resaltó que aunque las empresas tienen cursos, “también los estamos ofreciendo a través del IMSS en nuestra plataforma de cursos en línea masiva, el CLIMSS, que ya ha capacitado a más de 1.5 millones de personas únicamente sobre aspectos de COVID. Y tendremos también otra serie de recursos educativos para cada oficio, para cada changarro, para cada empresa, chicas, grandes y medianas”.
Las empresas, explicó, tendrán que presentar su plan para usar estos recursos y se les irá evaluando.
Finalmente, expresó, “pasaremos a la nueva realidad, que es el semáforo y estaremos a partir del 1 de junio, con este amigo, ahora, que nos va a decir quién puede salir y quién no puede salir a la calle y cuánta actividad tenemos. Entonces, esto es fundamental porque esto es lo que nos va a proteger que no haya un rebote importante de transmisión”.
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