“Sigo siendo de centro derecha”

En el último tiempo, se levantó un profundo debate en torno a la “nueva” derecha chilena y sus características en comparación a la más tradicional. Y es que, durante los meses de pandemia, algunos rostros clásicos de estos partidos políticos votaron a favor de proyectos asociados a la oposición. Dentro de estos, se encuentra el pre-candidato presidencial de Renovación Nacional, Mario Desbordes.
Proyectos como el retiro de los fondos, aprobación de la extensión del post natal, entre otros, han recibido el apoyo de la carta presidencial de RN y otros políticos de derecha. Así, se levantó cuestionamientos y roces entre la derecha más tradicional y los nombres actuales.
Sin embargo, en conversación con Un País Generoso, Mario Desbordes rechazó los comentarios que lo asocian a la oposición y a la izquierda por votar a favor en estos proyecto. Además, insistió en que continúa siendo parte del oficialismo, pese a los roces con el Gobierno.
¿Qué dijo Mario Desbordes?
“Si eso es ser de izquierda, estamos en un planeta equivocado”, aseguró Mario Desborde ante su apoyo a proyectos como el retiro del 10% y la extensión del post natal. “Sigo siendo de centro derecha”, continuó el pre candidato presidencial ante estos cuestionamientos.
Sin embargo, reveló que sí existe un “sector de la elite” que no lo “quiere” por múltiples razones, pero que nunca se ha sentido como “paria” en la derecha chilena. Además, niega que esto sea por “ideas de izquierda”, asegurando que su plan de Gobierno es bastante similar por la derecha europea.
Mario Desbordes establece una diferencia en torno a la derecha estrechamente relacionada con el legado de los Chicago Boys, señalando que esta ha evolucionado. “Plantemos una economía social de mercado”, asegura la carta de RN sobre su visión.
Sobre el espionaje a periodista
Una de las controversias asociadas durante la campaña de Mario Desbordes se refiere a los casos de espionaje a periodistas investigando al Ejercito. El pre candidato insistió que sí justifica la acción pero no por el espionaje, sino que por lo “delicado” del trabajo que se estaba haciendo.  
Aseguró que los periodistas tienen derecho a ejercer su labor, pero al tratar con documentos clasificados, se entra en un dilema. “No se queje si el Ejercito pide autorización a un juez e interfiere en sus teléfonos para saber quién filtra documentos sensibles”, señaló Desbordes sobre la publicación de esta información en diarios y libros.
 

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