Lleva más de 80 años de trayectoria. En sus instalaciones se reunieron figuras de la talla de Jorge Luis Borges, Alfonsina Storni y Alejandra Pizarnik, entre muchas otras. Fue declarada de “interés cultural” por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires en 1998. Pero nada de esto bastó para que la crisis no determinara el fin de la histórica librería/bar/confitería/espacio cultural Clásica y Moderna.Este martes 19 el local de Av. Callao al 800 fue desalojado por orden judicial: los administradores venían atrasados con el pago de varios meses de alquiler debido a las escasas ventas y, si bien tienen 30 días más para abonar el total de la deuda y reabrir el local, no hay muchas esperanzas.
Su cierre significa dejar en la calle a 10 familias, aunque esta situación -según apuntó Fernando Monod en declaraciones a Infobae- “no escapa a la realidad de muchos locales y negocios de la ciudad”.Inaugurada en 1938 por Francisco Poblet y regenteada por su hija “Natu” Poblet hasta hace 2 años, Clásica y Moderna había quedado en manos de su marido Alejandro Monod, aunque debido a una enfermedad pasó a las de su hermano, Fernando.Sin embargo, los que saben coinciden que el alma de la librería se perdió con el fallecimiento de “Natu” en junio de 2017. Ahora, literalmente, podría perderlo todo.
