En conversación con La Segunda, el periodista y comentarista deportivo, Manuel de Tezanos, reveló el duro episodio que vivió en 2010 con la muerte de su hijo Juan, de dos años y medio.
Entonces, De Tezanos vivía en Argentina, trabajaba para Fox Sports y su hijo falleció en la Clínica Anchorema de Buenos Aires, a causa de una infección, luego de ser intervenido por una peritonitis. Desde entonces, reveló, utiliza una corbata negra en sus apariciones en TV.
De Tezanos contó que a los dos meses de su nacimiento, a su hijo le dio meningitis, de la que “se salvó milagrosamente. Lo dieron de alta, pero dos días después volvió a la clínica por una hidrocefalia que lo tuvo en la UTI por 30 días más”.
“Pese a todo salió adelante y empezó otra etapa durísima en el centro de rehabilitación del Ejército en Santiago” narró De Tezanos, quien recordó que “como buen luchador, un año después salió caminando de ese centro”.
Cuando estaba en Buenos Aires, luego de trasladarse por asuntos laborales, en octubre de 2010, Juan comenzó con episodios de fiebre, los que a un tercer diagnóstico, diez días después de iniciados, fueron detectados como síntomas de una peritonitis.
El hijo del comentarista fue operado de urgencia, intervención en la que no tuvo complicaciones y, debió quedar hospitalizado, “para que le volvieran a instalar una válvula por su hidrocefalia. Se suponía que todo iba a estar bien y que el procedimiento era sólo de rutina”.
“Jamás creí que mi hijo pudiera morir. Incluso temprano ese día fui a cambiarle los neumáticos al auto. Pero esa tarde le volvió l fiebre. Era feriado y había un médico suplente, perdimos varias veces que fueran a verlo, no reaccionaron a tiempo y Juan murió. Tenía un virus intrahospitalario” dijo el periodista.
De Tezanos además reveló que “me pasó algo muy especial; mientras esperábamos afuera de la UTI sentí cuando él moría. Fue un par de segundos de mucha paz, de descanso para él tras tantas batallas”.
“Hay una nebulosa gigantesca, de pena, llanto, el mundo se viene abajo. Por suerte existía mi hija. Sin ella, no sé que hubiese sido de mí. Y además puede pasar que como matrimonio te quedas a la deriva” dijo el comentarista.
El periodista también contó que en abril de 2018 los restos de su hijo fueron trasladados a Chile. “Lo enterramos en un lugar precioso, en Matanzas, en la casa de mis exsuegros, arriba de un peñon frente al mar. He ido tres veces a verlo y ha sido muy duro, tremendo. En diciembre lo visité y lloré tanto que después de almuerzo me tuve que ir a dormir hasta el día siguiente”.
