El ministro Briones salió al paso de las críticas y defendió, fiel a su estilo, con números y sutilezas, la ayuda del Estado durante la crisis económica derivada de la pandemia del Covid-19. El jefe de la cartera de Hacienda sacó su libreta de datos duros y aseguró que el esfuerzo fiscal ha sido tremendo e incluso supera a todos los países de la región. ¿Será tan así?
Ignacio Briones escribió en El Mercurio y replicó a quienes apuntan a que mejor hay que rascarse con las propias uñas, justo en medio de la discusión por el segundo retiro del 10%. El proyecto que irrita al Gobierno y que La Moneda busca derribar, a toda costa, bajo el argumento de que con los beneficios que ha entregado hasta ahora no sería necesario sacar nuevamente plata de las AFP.
“Se ha hecho recurrente, principalmente desde la oposición, plantear que el Gobierno ha hecho poco y nada en materia de ayuda a las personas durante la crisis. La crítica fundamentada es siempre bienvenida. En este sentido, uno puede -y es valioso que así sea- tener sus propias opiniones, pero no sus propios datos. Veamos”, dice Briones al inicio de la columna publicada por el matutino y compartida en Twitter por el jefe del Segundo Piso de La Moneda Cristián Larroulet.
En línea con el discurso gubernamental, el jefe de la billetera fiscal fue enfático en señalar que “tan solo dos semanas después del primer caso de covid-19 registrado, el Gobierno anunció el primer paquete económico y social. Luego vendrían más paquetes, incluyendo el fondo Covid por US$ 12 mil millones, fruto del acuerdo del 14 de junio y a la fecha ello le ha significado al fisco movilizar más de US$ 15 mil millones, incluyendo una componente relevante de transferencias directas a las familias”.
Ante esto, el ministro Briones se pregunta: “¿Han sido pocos los recursos transferidos a las familias?”. Según el secretario de Estado, el Gobierno ha desembolsado US$ 6.200 millones en transferencias directas, en promedio US$ 1.000 millones al mes, y esta cifra, de acuerdo a sus cálculos, representa un 2,5% del PIB; la proporción más alta de la región junto a Brasil.
Dentro de las partidas más importantes para el ministro de Hacienda, el Ingreso Familiar de Emergencia implicó desembolsos por US$ 3.400 millones y llegó, en palabras de Briones, “a más de ocho millones de personas, cuatro de cada 10 chilenos”. Además, dice, “más de 1,6 millones de personas recibieron el bono clase media, con un costo de US$ 1.000 millones, mientras que los préstamos solidarios a la clase media han movilizado US$ 1.250 millones”.
El jefe de Teatinos 120 explicó que el PIB total retrocederá unos US$ 14.000 millones este año. Y de ese monto, dijo, “puede estimarse que la pérdida de ingresos laborales de las familias ascienda unos US$ 7.000 millones”. Es decir, “como país hemos hecho un esfuerzo inédito en cubrir una fracción significativa de la caída de ingresos laborales”, aseguró Ignacio Briones, destacando, además, que los préstamos Fogape con garantía estatal han cursado créditos por US$ 12.000 millones a cerca de 260.000 empresas, un 97% de ellas pymes. A modo de referencia, comentó, “durante la crisis subprime , en todo un año el Fogape movilizó US$ 2.400 millones de dólares hacia 75.000 empresas”.
Con los números sobre la mesa el ministro de Hacienda insistió en que “son más de 50 las distintas medidas tomadas durante esta crisis y así, si consideramos todos los compromisos sobre la línea de acuerdo a la metodología del FMI, el esfuerzo fiscal en Chile asciende a un 8,4% del PIB. Este supera a todos los países de la región, es similar al de países como Alemania (8,3%) o Austria (8,5%) y se compara favorablemente con una serie de países desarrollados”.
A pesar del autoelogio, el titular de Hacienda se pregunta “¿es esto suficiente?”. Adivine la respuesta. Exacto. “Sabemos que nunca será suficiente”, apuntó haciendo referencia a que se implementado un “inédito programa” de subsidio al empleo por US$ 2.200 millones que hoy, a poco más de un mes, ya cuenta con 160.000 trabajadores inscritos y aceptados.
“El desafío que enfrentamos es enorme. Vivimos la peor crisis de los últimos 100 años y la pandemia no ha sido superada. Los chilenos esperan que abordemos estos desafíos con altura de miras; con unidad de propósito. No en todo, pero sí en lo sustantivo. Ello supone más diálogo y más acuerdos. Y para dicho diálogo, un punto de partida siempre fundamental es la crítica constructiva, anclada en el reconocimiento de lo que se ha obrado”, cerró el ministro Briones.
Todo un contraste
Pero los datos optimistas de Briones contrastan claramente con lo que han planteado incluso desde el oficialismo, que exigen un mayor esfuerzo fiscal al Ejecutivo para ir en ayuda de las familias afectadas por la crisis
Además, instituciones como la Fundación Sol han hecho ver lo insuficiente de la respuesta del Gobierno. “Sumando el primer y segundo retiro de las AFP, los trabajadores/as podrían llegar a aportar cerca de US$35.000 millones para cubrir la crisis, monto siete veces mayor que los recursos que ha entregado el Gobierno para apoyar a los hogares en Chile”, estiman en el centro de estudios.
Por otro lado, un informe del Partido Socialista realizado con el apoyo del Instituto Igualdad revela que la ayuda del Gobierno para enfrentar la crisis ha sido “insuficiente y tardía”, lo que terminó creando un cuadro donde los “propios trabajadores debieron hacerse cargo con sus ahorros destinados originalmente a seguridad social, y para el 2021, el Gobierno subvalora la persistencia de altas tasas de desempleo”.
“Los trabajadores han concurrido mayoritariamente con sus propios fondos a enfrentar la crisis, con cerca de US$17.500 millones, que se desglosan en más de US$16.000 millones por el retiro del 10% de las AFP y US$1.500 millones de sus cuentas del Seguro de Cesantía, a través de la Ley de Protección del Empleo”, señala el documento.
Con todo, los dichos del titular de Hacienda no se alejan de los fríos números y de acuerdo a un estudio realizado por el Banco Mundial, que será publicado la próxima semana, Chile fue el país de la región que más aumentó las ayudas a los hogares para enfrentar los efectos económicos derivados de la pandemia del coronavirus.
De acuerdo al sondeo consignado por El Mercurio, entre el 20 de mayo y el 8 de junio, 19,6% de los encuestados en Chile dijo haber recibido algún tipo de ayuda de parte del Estado; mientras que entre el 31 de julio y el 11 de agosto, el 46,7% de los consultados declaró haber recibido algún tipo de apoyo. Esto representa un incremento de 27 puntos porcentuales.
Sin embargo, pese a esto, el Banco Mundial proyectó que durante este 2020 las personas que se encuentran en situación de pobreza podrían aumentar en 800 mil, llegando hasta el 12,3% de la población.
