El Banco Central, en su Informe de Política Monetaria (Ipom) de diciembre, estimó que la economía nacional se contraerá entre un -5,75% y un 6,25%, en tanto que para el año 2021 proyectó un crecimiento de entre 5,5% y 6,5%.
En el reporte, el organismo sostuvo que tras la contracción del segundo trimestre la economía ha mejorado, “y las medidas de apoyo a los hogares y al crédito han logrado limitar la amenaza que se cernía para el bienestar de la población y la solvencia de las empresas”.
“Sin embargo, la prolongación de las restricciones sanitarias, la lenta recuperación de los rubros más afectados y las huellas que deja la crisis, han incidido negativamente en el dinamismo de la recuperación, afectando no solo a la demanda agregada, sino que también a la capacidad de respuesta de la oferta. Como resultado, la caída de la actividad este año será mayor que la prevista en septiembre”, indicó el informe.
El Banco Central además indicó que, el aumento del consumo, impulsado por el retiro de fondos previsionales, provocó el alza de precios por sobre lo esperado, pero que no tendrá efecto en la inflación a mediano plazo. Para 2020, el organismo estimó que dicho indicador será de un 3%.
Sobre el escenario macroeconómico, el Ipom indica que “sigue mostrando más incertidumbre que lo usual” y planteó que “el riesgo de un aumento significativo de los contagios sigue plenamente vigente y podría tener efectos económicos relevantes si se deben reimponer medidas sanitarias más restrictivas”.
“La economía transita por un proceso de recuperación que enfrenta tanto los desafíos de la evolución de la pandemia como de la situación política tras la crisis social iniciada hace poco más de un año” indicó el Banco Central.
