El ministro de Justicia, Hernán Larraín, expuso esta jornada por la nominación del ministro de la Corte de Apelaciones, Mario Carroza, para la Corte Suprema, en el cargo que dejó vacante el juez Lamberto Cisternas.
Larraín dijo en la sesión que “la integridad que ha exhibido el Ministro Mario Carroza en su trayectoria judicial, su compromiso con la justicia y la debida aplicación de la ley, la ecuanimidad manifiesta en sus fallos, el apego a la doctrina nacional e internacional de los derechos humanos, entre otros factores, lo hacen acreedor, a juicio de la Corte Suprema y del Presidente de la República, para formar parte de nuestro más importante tribunal de la República”.
El ministro de Justicia además profundizó en los casos que Carroza ha debido revisar y resolver, especialmente los relacionados con causas de DD.HH. y planteó que “le ha correspondido dictar sentencias en casos que son llamativos, y que están ligados a los últimos años de nuestra trayectoria patria. No se trata de una personalidad que busque el lucimiento, sino que, por mero azar, ha debido asumir una tarea en la cual han sido los tribunales de justicia, ante las dificultades de la política para cerrar las heridas del enfrentamiento sufrido por nuestra patria en el último tercio de la historia del siglo XX, los llamados a conocer y resolver asuntos dolorosos de nuestro pasado”.
“Mario Carroza ha cumplido esta labor con rigor intelectual, equilibrio y aplicando la ley y el derecho internacional de los derechos humanos, alternando la severidad con la levedad cuando la ocasión lo exige. Algunos querrán ver en esta propuesta una decisión polémica, pero es precisamente por esta razón que la Constitución entrega esta potestad al Senado de la República”, dijo Larraín.
