Para evitar un control de tránsito, una mujer embarazada y con un bebé a bordo arrastró sobre el capot de su auto a un policía por varios metros. El hecho sucedió este viernes por la noche en la ciudad de Cipolletti, Río Negro.Debido a las nuevas restricciones dispuestas para frenar los contagios en la segunda ola de coronavirus solo pueden circular personas que cumplan con tareas esenciales. Aún así, la escena ocurrió poco antes de que entraran en vigencia las nuevas medidas.Fue en la calle 25 de mayo, zona céntrica de la ciudad rionegrina, donde un policía interceptó a un auto para un control, pero su conductora no estaba dispuesta a frenar. Negada a acatar las órdenes la mujer de 25 años que estaba acompañada de su pareja puso en marcha su vehículo y arrastró con este al efectivo.Según testigos, el hombre fue arrastrado varios metros sobre el capot hasta llegar a la intersección de las calles Mengelle y Roca. Posteriormente, la joven fue interceptada por un patrullero y al bajarse del vehículo se reveló no solo estaba embarazada, sino que además iba con un bebé de un año y medio a bordo.El uniformado víctima del ataque no sufrió heridas de consideración y la mujer quedó imputada por atentado y resistencia a la autoridad. A la conductora se le concedió la libertad por ser la madre del bebé y estar embarazada pero su marido quedó detenido en la Comisaría Cuarta de Cipolletti.
