Nicaragua: las autoridades acusan a la Iglesia católica por “lavado de dinero”



En la jornada del sábado, la policía de Nicaragua informó que inició una investigación por “lavado de dinero” contra la Iglesia Católica, por lo que le ordenó al cardenal Leopoldo Brenes que presente los documentos que muestren los movimientos de las cuentas bancarias de las diócesis que intervinieron.Mediante un comunicado publicado, se afirmó que el viernes 19 de mayo las autoridades fueron anoticiadas de “actividad ilícita en el manejo de fondos y recursos en cuentas bancarias que habían pertenecido a personas condenadas por traición a la patria”.Además, se explicó que “el resultado de las investigaciones confirmó la sustracción ilegal de recursos de cuentas bancarias que se había ordenado por Ley congelar, así como otros ilícitos que todavía están siendo investigados como parte de una red de lavado de dinero que se ha descubierto en diócesis de distintos departamentos”.Al mismo tiempo, según la Policía, la Fiscalía General de la República, la Superintendencia de Bancos y la Unidad de Análisis Financiero, “se confirmaron movimientos delictivos con fondos que, para la diócesis, han ingresado irregularmente al país”, por ende, “se han abierto procesos por todos estos delitos”.En la previa a estos sucesos, Agencia EFE publicó que, a partir de la información de fuentes eclesiales, el Gobierno de Daniel Ortega ya había congelado las cuentas bancarias de al menos tres de las nueve diócesis de la Iglesia católica nicaragüense. Las que cuentan con sus cuentas bancarias restringidas son las de Managua, que preside el cardenal Leopoldo Brenes, y las de Matagalpa y Estelí, a cargo del obispo encarcelado Rolando Álvarez.También se inició un proceso legal contra el sacerdote Jaime Montesinos, párroco de la diócesis que dirige el obispo Álvarez, ya que se lo acusa de cometer actos que van contra la independencia, la soberanía y la autodeterminación de la nación.La mala relación entre el Gobierno de Ortega y la Iglesia Católica tiene mucho tiempo, de hecho, el propio Papa Francisco se ha manifestado, ya que durante la entrevista que le dio a Infobae, lo tildó de ser una “dictadura grosera”.



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