En los últimos años, el cine argentino se vio potenciado de una manera exponencial. Las cifras lo demuestran: el público fue creciendo y apostando por las producciones nacionales cada vez más.Sin embargo, uno de los géneros que más se vio beneficiado es el de las biopics: las películas que retratan en la pantalla grande la vida de figuras centrales se convirtieron en un éxito.Pero… ¿por qué impactan tanto en la sociedad esta clase de historias? Para averiguar más sobre el tema, FILO contactó a Mariano Oliveros -marketing cinematográfico-, Rolando Gallego y Matías Orta -críticos de cine- y Nicolás Leonardo Vetromile – trabajador audiovisual del INCAA-.
¿Qué es una biopic?
Esta clase de películas están basadas en una historia en particular sobre una persona: puede ser un famoso o alguien oculto de la historia general, en donde se buscan ampliar detalles desconocidos.¿De dónde proviene el término? La palabra tiene origen inglés, “biographic picture”, para definir a las producciones con esa premisa. Sin embargo, es bueno saber que no todas las películas que parten de personajes verdaderos pueden ser llamadas con ese nombre, debido a que muchas veces los directores buscan mostrar al personaje en otro tipo de formato.
Existen dos tipos de biopics: ya sea las que respetan fielmente los eventos acontecidos, o sino aquellos que lo toman como punto de partida al personaje y a los eventos pero que luego se derivan en ficción, con mayor libertad en la dirección.¿Cuáles fueron las primeras películas de este género? A pesar de que no hay un registro oficial, algunas de las que figuran son “Su mejor alumno”, de 1944 y que expone la historia de Sarmiento, o “El santo de la espada”, de 1970 y que explica la vida de José Martín.
Últimos casos
“El Potro: lo mejor del amor”
En tan sólo el primer fin de semana luego de su estreno, “El Potro: lo mejor del amor”, la película dirigida por Lorena Muñoz, fue gratamente recibida por todo el público: según las estadísticas de Ultracine, cosechó un total de 188.478 espectadores.”El éxito de ‘El Potro’ no es casualidad (…) es un retrato que favorece al retratado, un espacio idílico que se compone como alguien inalcanzable o semidios”, aseguró Vetromile.Pero no es la única: tomando algunos casos “El Ángel”, de Luis Ortega, tuvo 1.306.665; “Gilda”, protagonizada por Natalia Oreiro, tuvo 925.000 y “El Clan”, dirigida por Pablo Trapero, tuvo 2.466.760.
¿Cuál es la clave del éxito?
Según la visión de los entrevistados, todos coinciden en que el secreto de las biopics es que puedan expresar una historia atrapante de una persona pública, en la cual el espectador pueda sentir no sólo afecto sino intriga por conocer todas sus facetas.Vetromile sostuvo que, en una visión más profunda, la clave consiste en que “el espectador quiere volver a ver al ídolo en sus mejores años, y verlo siempre favorecido. Los de gran envergadura y llegada al público son exitosos, a gente los quiere ver como triunfadores”.Sin embargo, no se trata solo de sus logros, sino también de dar a conocer sus defectos, lo que lo refleja como una persona real; en base a este aspecto Oliveros agregó: “Lo que llama la atención es el morbo (…) saber que es efectivamente lo que le sucedió a la persona a lo largo de su vida”.
¿Fenómeno latinoamericano?
No se trata de un género que se limita sólo en la Argentina: hubo varios ejemplos en Latinoamérica que demuestran una explosión de este fenómeno; el caso más reciente fue la serie que cuenta la vida de Luis Miguel, la cual tuvo una gran audiencia en Netflix. Además, se vienen otros proyectos: Shakira tendrá su serie biográfica y Diego Maradona también, la cual va a estar protagonizada por Nazareno Casero, Nicolás Goldschmidt y Juan Palomino.”En el último tiempo, particularmente con biopics musicales, en cine y televisión, se ha posibilitado un doble disfrute de las figuras analizadas”, comentó Gallego.Las biopics nacionales, ¿tienen influencia extranjera?
Desde su estética hasta su producción, cada película nacional deja una huella en todo el país. Sin embargo, no deben ser consideradas por fuera de lo que ocurre en el mercado cinematográfico mundial.Justamente, ya fueron presentadas películas de este estilo, como “Bohemian Rhapsody” (que expone la historia de Freddie Mercury), y también otras en producción, como la de Madonna.
“La mayor influencia en estas producciones recientes viene por el lado de cómo están contadas. Los biopics más recientes tienen una calidad más cinematográfica, están más cuidados, aunque eso siempre tiene que ver con los realizadores. Lo importante es inspirarse en todo lo bueno y potenciarlo”, afirmó Orta.Por su parte, Gallego puso el énfasis en el debate que ronda este tema: “El cine ya ha trazado todos sus parámetros y posibilidades, no pensar que han influenciado las experiencias foráneas a las locales es negar un diálogo que mantienen las cinematografías locales con las universales”.
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