El cáñamo es una de variedad de la planta de cannabis que suele confundirse con la marihuana aunque su contenido de tetrahidrocannabinol (o THC, el ingrediente psicoactivo del cannabis) sea menor al 0.3 por ciento.Se utiliza para producir aceite, alimento, papel, textiles, fibra y diferentes bálsamos y sin embargo su cultivo no es legal en algunos países del mundo, como los Estados Unidos. Pero en el país del norte la legislación podría cambiar para habilitar el cultivo de cáñamo por primera vez en casi un siglo.En los últimos años la planta se ha popularizado por su contenido de cannabidiol (CBD), que no es psicotrópico y se estima que tiene más aplicaciones médicas que el THC. El CBD se puede encontrar hoy en día en cafés, cremas de belleza, comestibles e incluso Bloomberg ha reportado que Coca Cola estaría considerando una gaseosa con CBD.
Los usos del cáñamo | Imagen: Proyecto Cáñamo Argentina
A pesar de su popularidad en los Estados Unidos, el cáñamo se encuentra en una zona legal gris en el país. Siendo una variedad del cannabis, era alcanzado por el Acta de 1937 que comenzó el proceso prohibicionista, hasta que en 2014 el Congreso aprobó un programa que permitía el cultivo controlado con aprobación de la DEA.La nueva ley quitaría el CBD del listado de sustancias controladas y aunque no permitirá el libre cultivo, es un avance trascendental.“Es un paso adelante muy importante en materia de reconocimiento del gobierno federal acerca de qué es el CBD y cuál es su nulo potencial de riesgo,” dijo John Hudak, miembro de la ONG Brookins Institution y el autor del libro Marijuana: A Short Story.Los granjeros no serán controlados por la DEA pero las restricciones federales se conservarán, deberán tener licencia y cumplir con los requisitos del Departamento de Agricultura. Según aseguran los impulsores de la ley, gracias a que la planta puede crecer en varios climas la legalización también ofrecerá nuevas oportunidades laborales en regiones cuya economía es sostenida por actividades como la minería, por las condiciones de su suelo.Por su parte Justin Strekal, director del grupo pro-marihuana NORML destacó que hasta ahora los productores han ofrecido “productos de variable o cuestionable calidad y seguridad” y que será tarea de los legisladores proponer estándares para el CBD proveniente del cáñamo para “aumentar la satisfacción y la confianza del consumidor mientras esta industria emergente realiza la transición al mercado legal”. Strekal no está equivocado. En 2017 la publicación Natural Products Insider realizó una investigación que reveló que los productores de CBD aseguran (en el mejor de los casos) llevar adelante “prácticas de fabricación apropiadas” sin ningún tipo de control. Aunque es ilegal vender algo que no es lo que su paquete clama, no hay entidades realizando las pruebas correspondientes.
Aceite de cáñamo chileno | Imagen: Biofilia
Un control realizado en 2016 por la Administración de Drogas y Comestibles (FDA por sus siglas en inglés) descubrió que varios de los aceites de CBD sometidos a pruebas contenían insignificantes cantidades o nada en lo absoluto. De hecho, varios contenían cantidades ilegales de THC en su lugar — volviendo imposible saber si el efecto que generan los aceites de CBD son producto del ingrediente o del THC que contienen.En nuestro país el cáñamo era cultivado en cantidades industriales de forma legal hasta finales de la década del setenta, cuando en medio de una campaña prohibicionista y con el apoyo de la maquinaria mediática, el gobierno de facto lo estigmatizó e incluyó dentro de la Ley 21.671 que prohibe “la siembra, plantación, cultivo y cosecha de la Adormidera (Papaver somniferum L.), del Cáñamo (Cannabis sativa L.) y de la Coca (Erythroxylon coca Lam)”.Hoy se consiguen productos con CBD importados de los Estados Unidos o Chile a través de portales de compra venta, pero varios grupos independientes, como Proyecto Cáñamo Argentina, intentan impulsar un cambio de legislación, que fomente el desarrollo de una industria local informando acerca de las propiedades de la planta y su proyección para el reemplazo de materiales derivados del petróleo.En esta nota:
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