Una cincuentena de destacados científicos, académicos, parlamentarios y representantes de organizaciones civiles, provenientes de distintos puntos del país, participaron en una jornada de diálogo con el fin de elaborar las bases de una Ley Marco de Cambio Climático, que fue convocada por las comisiones de Medio Ambiente y Desafíos del Futuro del Senado que preside el senador Guido Girardi.
El parlamentario del PPD explicó que “Chile debe tener una Ley Marco del Cambio Climático y hoy invitamos a la Academia de Ciencia, a los principales científicos y científicas, a todas las universidades, el Centro de Modelamiento Matemático, a las mayores inteligencias del país en esta materia y, también organizaciones de la sociedad civil para elaborar de una propuesta participativa”.
El senador agregó que “junto a la Biblioteca del Congreso y las comisiones del Futuro y de Medio Ambiente del Senado, vamos a resumir los aportes de esta reunión y se los reenviaremos a todos los asistentes para tener una institucionalidad con un conjunto de instrumentos que nos ayuden a enfrentar este desafío”.
Girardi afirmó que “a fines de abril, principios de mayo, presentaremos en el Congreso buena parte de los proyectos –algunos ya están ahí- que nos permita proteger nuestro ecosistema, disminuir las emisiones y tener efectos paliativos (…) Hay que impulsar iniciativa innovadoras porque si no hacemos los cambios pronto, en cuatro o cinco años más, tal vez, ya sea demasiado tarde”.
El legislador dijo que, a su juicio, la propuesta debiera incluir, “una Agencia autónoma de Cambio Climático con metas establecidas como dejar de producir energía usando carbón; avanzar a tener el 100% de energía renovable aprovechando que tenemos el desierto más irradiado del planeta e importantes reservas de recursos hídricos y eólicos; que las mineras usen sólo agua desalada y no compitan por su uso con las comunidades y la agricultura; desprivatizar el agua y que vuelva a ser como en todo el mundo un bien nacional de uso público”.
Y agregó que se debe impulsar leyes que protejan los glaciares, los océanos, la biodiversidad; que en las ciudades aumenten las ciclovías y los parques; de reforestación de las quebradas y de los pies de monte, porque los árboles pueden capturar el CO2. Iniciativas que cambie el modelo de consumo, que eviten la pérdida de un tercio de los alimentos que se producen; que disminuyan la ingesta de carnes que producen el 65% de óxido nitroso y consumir proteína vegetal que es igual de nutritiva pero contamina 250 veces menos; bajar la huella hídrica, regular la salmonicultura”.
Cop25: última oportunidad
El senador resaltó la urgencia de tomar esas medidas porque “la humanidad va camino a una catástrofe que ya empezó y parte de ella ya es inevitable. Las aspiraciones de la COP21de Paris que la temperatura no aumentara más de 1,5° fracasaron y entramos a un escenario de aumento de 2 a 3° de temperatura y puede ser en los próximos 20 a 30 años”.
Afirmó que “de 1850 a la fecha la temperatura sólo se incrementó en 1°, lo que nos tiene enfrentando aluviones, sequias, derretimientos de glaciares, escasez de agua, sequías, migraciones, huracanes… Un incremento de 2 a 3° en pocas décadas puede ser un desastre y la destrucción de millones de especies y también de los seres humanos”.
Por ello él estima que “la COP25 es, tal vez, la última oportunidad que tiene la humanidad de rectificar el mundo, por eso el llamado es de urgencia a esta generación que tiene la responsabilidad con el futuro. La COP de Chile no puede fracasar como las anteriores o vamos camino al precipicio”.
