Para nadie es desconocido que el sistema penitenciario de Sinaloa sigue presentando deficiencias, y prueba de ello son las recomendaciones que ha realizado la Comisión Estatal de Derechos Humanos con el fin de que sean corregidas las anomalías.Desde el 2016 se han estado realizando observaciones de cosas por corregir, y el Gobierno del Estado las ha ignorado, lo que se traduce en riesgos para la seguridad de los propios internos.De acuerdo con datos de la Asociación Política de Abogados, que preside José Daniel Cebreros Ordóñez, entre las recomendaciones que se han hecho destaca el hacinamiento que persiste en los penales de Los Mochis, Culiacán y Mazatlán, debido a que su estructura no está diseñada para el número de internos que mantienen. Entre otros aspectos relevantes, está el de una alimentación no adecuada, limitada e ineficiente, lo que podría acarrear problemas en la salud de los internos.El problema para atender dichas recomendaciones tendría que ser de tipo económico y también de falta de interés, por lo que el Ejecutivo estatal estaría incumpliendo de forma permanente la reglamentación al no brindar las garantías para un buen desarrollo y readaptación social de quienes infringen la ley y terminan en estos espacios.
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